La noche del miércoles fue movida en el Camp Nou. Cuando todos descansaban en sus casa, una llamada procedente desde Argentina alertaba del peligro de lesión que estaba corriendo Leo Messi. Un pinchazo en el muslo de la pierna izquierda privaba al excelente jugador de poder completar la sesión programada por Alfio Basile, seleccionador albiceleste. Afortunadamente, Messi se recuperó y en la sesión que hicieron ayer la pudo completar sin problema alguno.

Pep Guardiola, técnico azulgrana, teme que el argentino se lesione, más teniendo en cuenta su historial de dolencias y reconociendo abiertamente el peso que tiene el Pulga en su esquema y proyecto. Desde que se lesionara la pasada temporada, los servicios médicos del club y los responsables dietéticos planificaron un programa de alimentación que el delantero asegura estar cumpliendo a rajatabla, ya que la idea es que refuerce su dañada musculatura.

Messi dio el primer susto de la temporada. Por su pierna zurda pasa parte del éxito del Barça para la presente campaña: una lesión sería para el barcelonismo como entrar en una pequeña depresión.