El regreso de la plantilla del Real Madrid a los entrenamientos tras los dos días de descanso estuvo marcado por un nuevo contratiempo para Míchel Salgado que, cuando parecía restablecido de la lesión en la rodilla que sufrió en la segunda jornada ante el Levante, ha sufrido una lesión muscular en el gemelo.

El gallego saltó al campo con el grupo y se ejercitó con normalidad hasta que, una vez terminada la parte física se retiró al interior de las instalaciones con una "elongación en la unión músculo-aponeurótica del gemelo interno-sóleo" de su pierna izquierda, según indica el parte médico del club, por lo que se encuentra en tratamiento médico y fisioterapéutico.

Esta nueva lesión aplazará de nuevo su regreso al equipo y es casi seguro que se perderá el derbi del próximo sábado ante el Getafe. Un partido en el que tiene muy complicado estar también José Antonio Reyes.

El sevillano, que tuvo que dejar la concentración de la selección española, con una micro rotura fibrilar en el adductor derecho, saltó hoy al césped por primera vez, aunque él mismo aseguró después en rueda de prensa que aún parece pronto para que pueda estar en el Coliseum Alfonso Pérez.

Cassano, con el grupo

Por lo que respecta al entrenamiento en sí, la buena noticia fue ver a Antonio Cassano entrenándose con normalidad con el resto de sus compañeros y en principio listo para jugar el derbi.

Tras la habitual sesión física, Capello trabajó la táctica por líneas, entrenando por un lado a los defensas y por otro a los centrocampistas y delanteros antes de ordenar un partidillo en el que un día más Van Nistelrooy y Ronaldo estuvieron juntos, lo que podría ser la gran novedad en Getafe.