El compromiso de Casemiro convence a Zinedine Zidane
Incluso cuando no estaba jugando ni un solo minuto el jugador brasileño hacía un trabajo descomunal en todos los entrenamientos y siempre iba con una sonrisa en la cara.
Zinedine Zidane todavía no ha decidido cuál será su once titular para el Clásico en el Camp Nou del próximo 2 de abril y para la ida de cuartos de final de la Liga de Campeones, cuatro días después, contra el Wolsburgo. Prefiere esperar la vuelta de todos los internacionales y evaluar el estado de cada uno antes de tomar una decisión definitiva.
Sin embargo, es evidente que un jugador que no parecía contar mucho para el técnico cuando se hizo cargo del primer equipo aparece ahora como un serio candidato para jugar desde el principio esos dos encuentros tan relevantes. Hablamos de Casemiro, un futbolista, que ha sorprendido gratamente tanto al entrenador madridista como a sus colaboradores más cercanos. De hecho, tras el derbi ha sido titular en todos los partidos: Levante, Celta, Roma, Las Palmas y Sevilla.
No es ninguna casualidad que el brasileño fuera titular en los últimos partidos. El hecho de ser un mediocentro puro que aporta mucho equilibrio ha tenido mucho peso para que Zizou confíe tanto en él recientemente. Agradece su impacto físico en el juego, su inteligencia y su disciplina táctica, así como la libertad de movimientos ofensivos que su gran trabajo otorga a Toni Kroos y a Luka Modric.
Sin embargo, la decisión de confiar cada vez más en Casemiro tiene también mucho que ver con la actitud que el jugador de 24 años ha demostrado desde que Zidane está en el banquillo. Hasta tal punto que gente del cuerpo técnico reconocen en privado que han “alucinado” con la madurez del jugador. Incluso cuando no estaba jugando ni un solo minuto el brasileño hacía un trabajo descomunal en los entrenamientos y siempre iba con una sonrisa en la cara.
Actitud. Y, antes de los partidos, en el secreto del vestuario o en el túnel que conduce al campo, se expresaba como un veterano y animaba a sus compañeros con un entusiasmo encomiable. Ese espíritu tan positivo, cuando otros jugadores estaban decepcionando al míster, han empujado a Zidane para darle su total y absoluta confianza. Y Casemiro no parece dispuesto a que el entrenador se la quite. Sin duda, está luchando como nadie para ello.