Si fuera posible, Pep Guardiola introduciría a sus jugadores en una burbuja de cristal, cómoda, a buena temperatura, con todas las facilidades del mundo y no la reventaría hasta mañana, cerca de las siete de la tarde, hora programada para iniciar el corto viaje del hotel de concentración al Camp Nou. No le gusta un pelo el color que está tomando el encuentro. Los cuartos de final de la Champions League exigen lo máximo y cualquier detalle puede cambiar el panorama, pese a que el Bayern cayó el pasado sábado ante el Wolfsburgo (5-1) .
Por ese motivo, el entrenador no arriesgará y alineará mañana a todo su contingente de estrellas, desde Víctor Valdés a Samuel Etoo, pasando por Touré Yaya, Xavi Hernández, Andrés Iniesta o Leo Messi.
Diminutos. Las figuras del equipo están muy metidas en la eliminatoria. Les agradaría poder dejarla sentenciada, pero el técnico atenderá esta tarde a la prensa y su discurso será cauteloso, conocedor de cómo se dispara la euforia en el Camp Nou y de los daños colaterales que podría provocar un exceso de confianza.
Así deben sentirse o quieren que se les vea desde Múnich. Mark van Bommel atendía el domingo a la prensa y justificaba las declaraciones de su entrenador, Jürgen Klinsmann; éste acusaba a su plantilla de ser la gran responsable de haber hecho el ridículo en la Bundesliga. Y ayer le dio una vuelta más de tuerca el presidente bávaro, Karl Heinz Rummenigge: "Ganar al Barça es misión casi imposible". Mensaje claro, pero que no le gusta a Guardiola.
Laporta: "Hay que ser prudentes"
Joan Laporta parece que ha rebajado un poco el tono, después de que sus habituales declaraciones mostraran un tono de optimismo demasiado elevado que chocaban frontalmente con las que desde principio de temporada hace Pep Guardiola. En un acto de presentación de una nueva sintonía para animar al equipo, el presidente afirmó que "estamos en un momento para ser muy prudentes. Si decidiéramos ponernos eufóricos nos equivocaríamos. Tiempo atrás estuvimos cerca de conseguir grandes cosas y nos quedamos a las puertas de todo. Por ese motivo, hasta que no se consiga nada, mejor estar tranquilos y verlo todo con cautela". Laporta recordó que ayer hizo un año de su famosa frase de "al loro" en un encuentro de peñas y dijo que "no me arrepiento de ello".
