Los ilicitanos, que suman la tercera victoria consecutiva como locales, se alejan de la zona de descenso con el triunfo conseguido en un partido que se rompió con la expulsión del rayista Diamé.

Tras unos minutos de tanteo, en los que ambos conjuntos tocaban sin prisas en la zona ancha y sin apenas crear peligro ante el portal rival, el Elche pudo romper la igualada inicial a los catorce minutos, con un remate de cabeza de Usero que, bajo palos, despejó con muchos problemas el meta visitante.

El Rayo pasó a dominar el centro del campo y llevando peligro a la portería ilicitana, cuya defensa parecía atenazada y sin respuesta, ante la rapidez de movimientos, sobre todo por la izquierda, de los atacantes visitantes.

La segunda mitad arrancó con el Elche más adelantado y más directo, pero con un Rayo Vallecano muy bien puesto y sin descomponerse, lo que obligaba a que los locales jugasen pegados a la línea de cal, aunque los centros de Santos, Saúl y Zubiaurre no encontraban rematador, mientras que los visitantes no dominaban el balón con tanta claridad como en la primera parte.

Los cambios que introdujo Claudio, Dani Martín y Dani Benítez, no daban el resultado apetecido, aunque el primero de ellos pudo marcar a los 67 minutos, cuando remató un centro de Acciari ligeramente alto.

El Elche se adelantaría en el marcador en el minuto 77 cuando, tras una jugada personal de Santos, David Fuster remató un pase atrás y ajustado al poste izquierdo de la portería de Cobeño, sin que el portero visitante pudiera evitarlo.

Tres minutos después, Caballero Herrero señalaría un penalti, por manos de Diamé en el área rayista, que supondría la segunda tarjeta amarilla para el jugador visitante y su expulsión. La pena máxima la lanzó David Fuster y convirtió el segundo gol ilicitano.