La Policía de Madrid sí actuó ayer con mano firme y contundente a la hora de doblegar a los violentos y, a diferencia de lo que ocurrió el sábado en Montjuïc, el partido del Vicente Calderón discurrió sin incidentes gracias a la intervención policial previa. Horas antes del partido, la Policía detuvo a 18 hinchas del Sevilla por desórdenes públicos y riña tumultuaria en las inmediaciones del estadio rojiblanco, a donde se dirigían provistos de 42 bates de béisbol. Fuentes policiales precisaron a Efe que a uno de los 18 detenidos se le acusa además de atentado a agentes de la autoridad y daños. A los arrestados se les incautó, además de los 42 bates de béisbol, dos armas blancas, tres bengalas, cuatro cohetes y un spray.

Las detenciones se produjeron después de que los agentes identificaran durante la mañana del partido a un grupo de hinchas del Sevilla, formado por entre 50 y 60 personas, algunos de los cuales iban provistos de objetos contundentes, en los alrededores del Calderón. Al percatarse de la presencia del grupo, los agentes les retiraron los objetos y procedieron a su identificación.