Schuster ya es entrenador del Madrid. El alemán firmó ayer por tres años y, acto seguido, fue presentado en el palco de honor del Bernabéu. Con traje gris marengo, camisa azul claro y sin corbata, el técnico alemán no pudo disimular su nerviosismo. Apareció escoltado por Calderón y por Mijatovic. El resto de directivos esperaban en la primera fila. Di Stéfano aguantó en el escenario para darle la bienvenida. Un centenar de aficionados le esperaban en las gradas, pero sólo le vieron de lejos.
Calderón fue el primero en tomar la palabra, mientras el alemán escuchaba con atención: "Esta puesta de largo marca el inicio de las presentaciones de esta temporada. Queremos un grupo de profesionales que conjuguen coraje, pasión, buen juego, resultados y títulos. Un grupo de personas que a través de los valores que siempre han sido seña de identidad del club, formen un equipo. Schuster posee todos los valores a los que hago referencia. Ha sido un grandísimo jugador, un gran entrenador y una excelente persona. Iniciamos un nuevo camino y tenemos la intención de que el Madrid sea un equipo del que todos estemos orgullosos de su juego. Confiamos en él para formar un equipo que alcance la excelencia en el juego". Sus últimas frases fueron para darle la bienvenida en alemán.
Luego le tocó el turno al nuevo entrenador, que comenzó bromeando: "¡Qué gran sorpresa escuchar al presidente hablar en alemán, casi lo ha hecho mejor que yo! Es un día muy feliz para mí. Quiero dar las gracias a todos por dar la oportunidad a un entrenador joven de llegar a un club como este. El Madrid no es una casa nueva para mí. Tuve la suerte de jugar dos temporadas aquí y sé dónde estoy. Desde el primer día que piensas en ser entrenador es un sueño triunfar en un equipo grande, y el Madrid es uno de los más grandes. Estoy seguro de que las cosas van a salir perfectamente".
La estrella. Con esta presentación, Calderón cumple su objetivo de sentar a Schuster en el banquillo. Por la admiración y el respeto que le tiene le quiso regalar un camiseta del Madrid con el número uno a la espalda. "Para nosotros, Schuster es un gran fichaje".
Tras la presentación, le tocó responder a las preguntas de los periodistas durante media hora, hizo un aparte con medios alemanes y remató su día comiendo en el palco del Bernabéu con los directivos. Hoy se marcha a Alemania a resolver asuntos personales. Regresa el lunes y se pondrá manos a la obra. Mijatovic le tendrá informado por teléfono de todos los movimientos.
