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CSD | MIGUEL CARDENAL

"El Barça sería el Ajax o el Celtic en caso de independencia"

El presidente del CSD, Miguel Cardenal, atendió a AS en Barcelona. Analizó la situación política de Cataluña y las consecuencias que tendría si fructifica a la independencia.

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"El Barça sería el Ajax o el Celtic en caso de independencia"

—¿Qué opinión le merece un posible escenario con una Cataluña independiente?

—Todos los puntos de vista son respetables. Nací y viví en Euskadi en tiempos muy complicados por los motivos que ustedes saben. No me planteo el escenario de la independencia, eso no va ocurrir. Al Barça, por ejemplo, lo siento como algo mío y lo defendí hace un tiempo. Hay gente que me lo reprocha. No hay que centrarse sólo en la ley y sí en la realidad del deporte.

—Afectaría mucho a las competiciones, ¿no?

—El deporte se basa en contextos geográficos y si desaparece una parte no puede entrar en competición. Se rivaliza por zonas para luego llegar al nivel nacional, continental y mundial.

—¿Cómo dañaría a la estructura de un club como el Barça?

—Las finanzas de los equipos vienen dadas por los ingresos de televisión. En una Cataluña independiente de ocho millones de habitantes podrás llegar a ser un equipo de cantera como el Ajax, el Celtic, el Standard, etc... y llegar como muy lejos a los octavos, o a los cuartos de final de la Champions, por ejemplo. Y no es el discurso del miedo. Yo soy del Athletic y sé que no ganaremos nunca la Liga, pero lo acepto. Me parece un chiste plantearse dónde jugarán los equipos si hay independencia con todo lo que sucedería en el país y las situaciones de tensión que podrían generarse. Hay cosas más importantes que el fútbol.

—El presidente Bartomeu aseguró el domingo por la noche, tras el Barça-Levante, que el club no se iba a posicionar políticamente. ¿Qué cree de eso?

—No quiero pensar que el Barcelona ha recibido presiones de lo que tiene que decir o no y supongo que nadie estará influyendo en Bartomeu sobre la posición del Barça y la independencia.

—¿Qué quiere decir?

—Por la mañana dijo en El Periódico de Catalunya que el Barça se había hecho grande jugando en la Liga española. Luego, ante las cámaras de televisión, al final del día, otra muy diferente, alegando que el Barça no se posesionaba en el tema electoral. Espero que este cambio no responda a que alguien le haya llamado la atención sobre la primera respuesta. Si el Barça y el Espanyol quieren seguir jugando la Liga es porque tienen unos vínculos muy fuertes con España, es una manifestación de que se sienten españoles.

—¿Se utiliza al Barça como altavoz político en Cataluña?

—Llevo tiempo diciendo que los poderes públicos en Cataluña están instrumentalizando el deporte y estoy seguro que intentaron e intentan captar al Barça en ese sentido. No hay que ir más lejos que ver la campaña presentada hace unos días de Guanyarem.

—¿Por qué?

—Hubo una foto insólita de cinco personas en la que a tres no las conoce nadie (Xavier Vinyals, presidente de la Plataforma ProSeleccions Esportives Catalanes, Gerard Esteva, presidente de la Unió de Federacions Esportives de Catalunya, UFEC y Josep Ramon Vidal, representante de la Unió de Consells Esportius de Catalunya). A estos tres se le sumaron dos a los que trataron como los teloneros colocándoles en el lugar menos relevante de la mesa, en los extremos, en el lugar menos importante bajo la presidencia de los otros. Fueron el presidente del Barça, Josep María Bartomeu y del Espanyol, Joan Collet. Busquen ustedes en el mundo una foto así que no la encontrarán. Tratar de hacer creer luego que las personas menos importantes de esa fotografía son las caras más populares es algo que no acaba de entenderse y eso es una manifestación más de la anormalidad que se vive aquí, en Cataluña.

—Usted ensalzó el deporte catalán. Todo el problema, ¿cómo afectaría al deporte español?

—No es sólo un problema del deporte, sino de lo vida social. Se está llevando a cabo una acción que lo que está provocando es división, enfrentamiento y eso tiene unas consecuencias tremendas para la convivencia y para la normalidad de la vida social y del día a día. Todo esto está afectando a la riqueza, a la capacidad de inversión y eso lo estamos pagando todos.

—Si su hijo o sobrino tuviese dotes para jugar al fútbol, por ejemplo, ¿Iría a La Masía?

—Si no entrara en Lezama (es declarado seguidor del Athletic Club), me encantaría que fuese a La Masía, claro. Nadie duda de que la formación y el cuidado de las personas, por sus estudios y por su día a día es ejemplar, aunque considero que la FIFA tampoco lo duda. El problema con el centro de formación no es que a los niños lo traten mal.

—Hombre, eso es evidente.

—Hay unas reglas que indican cuando un niño de determinada edad puede ir de un país a otro a jugar al fútbol.

—¿Cree que el Barça es el único club que incumple las normas?

—No, no, no… No sé las cosas con detalle ni soy quién deba pronunciarse ahora sobre eso. La del Barça es una cantera ejemplar y no sólo en fútbol. Aportan muchos jugadores a las selecciones absolutas de diversas modalidades. El modelo de formación deportiva del Barça es muy bueno y reconocido en todo el mundo. Y eso nos satisface. Creemos que todos los niños, que son muchos, que vienen a España, tienen derecho a jugar al fútbol y no compartimos que se les pueda prohibir. Somos un país que acoge a la gente que viene de fuera y no creemos que deba existir una regla que limite su participación. Así lo recogen las leyes de España. Pero a partir de ahí, todo lo que sean los entresijos de la sanción al Barcelona los desconozco en el detalle.

—¿Le chirría la sanción?

—No me gusta hablar de lo que no sé del todo, pero sí que ensalzo y pongo en valor la formación que da La Masía. Señalar que cualquier padre o madre deben estar muy tranquilos por la formación que reciben allí o en cualquier club de España. Pero además, la del Barcelona está acreditada que tiene una formación de gran calidad técnica.

—Como Secretario de Estado, ¿está siendo muy dura la FIFA con el club culé?

—Leo cosas en los medios y le deseo al Barça lo mejor. Por supuesto que me gustaría que no fuese sancionado y que no le pasase a nadie más. No sería prudente expresarme sobre una situación que no conozco a fondo para decir si están siendo duros o no.

—¿Lo tienen complicado?

—El Barça tiene unos servicios jurídicos potentes, muy preparados y capacitados para defender los intereses de la entidad. Lo que no me gusta de la norma de la FIFA ya lo he dicho.

—¿La puede repetir?

—Sí, claro. Cualquier niño que venga a España me parece que tiene derecho a jugar al fútbol.

—¿El Barça les pidió ayuda?

—En ese sentido poca cosa le podemos ofrecer.

—¿Por?

—Eso depende de la autonomía del deporte y quien está más capacitado es la RFEF. Las Federaciones internacionales son autónomas y no mantienen relaciones con los gobiernos.

—La Federación también está sancionada por la FIFA, ¿no?

—Ellos son miembros de FIFA y por lo tanto pueden acudir y hacer valer y explicar las cosas que quieran.

—¿Podría el Barça inscribir jugadores?

—Mi deseo es que así fuera si es lo mejor para ellos. Sería igual para todo el resto de entidades del país. Pero creo que a día de hoy hay gente con más criterio que yo para contestar.

—¿Usted disfrutó con el Barça de Luis Enrique viéndolo en directo?

—Deje que piense.

—Le ayudo. Por ejemplo, en la final de la Champions del pasado junio en Berlín.

—Por supuesto. Disfruté mucho viendo un equipo español ganando la final de Berlín. Un equipo con los futbolistas que tiene el Barça, si eres un amante del fútbol, siempre tienes cosas para disfrutar. Allí juegan Messi, Suárez, Iniesta, Neymar, Piqué, Busquets, Bartra… Es un festival. Afortunadamente la Liga española tiene ahora mismo muchos de los mejores futbolistas del mundo y ver a un equipo como el Barça es interesante.

—¿Entendió que abroncaran a Piqué?

—Fue inaceptable e injustificable y espero que no vuelva a suceder.