Aquí Pau y después gloria

El aroma a Copa vuelve a sobrevolar el Power8 Stadium, cuando ni siquiera ha transcurrido un mes desde el 2-0 con el que el Espanyol remontó y apeó al Valencia de la competición, un martes 13. Hoy se reencuentran, con Pau —precisamente, el portero del torneo del KO— como titular por el sancionado Casilla y con los pericos mirando de reojo la ida de semifinales, el miércoles en Bilbao. No así el Valencia, que deposita la vista entera en el encuentro de esta tarde, pues precisa la victoria para seguir enganchado a la ambición de la Champions y para despegar de una vez por todas a domicilio.

Vienen los ché de caer en La Rosaleda (1-0) el pasado lunes, confirmando unos registros lejos de Mestalla que no dan ni para luchar por la cuarta plaza, ni casi por Europa: sus 13 puntos de 30 posibles situarían al Valencia noveno si solo se contasen los partidos fuera. No parece a priori el Power8 el mejor escenario para remontar el vuelo, pues el Espanyol ha obrado en su estadio un hechizo difícil de quebrar: encadena cuatro victorias como local, entre Liga y Copa, en las que además marcó nueve goles y solo recibió uno.

Sin reservas. Sin el mencionado Casilla, ni tampoco Abraham por lesión, Sergio González como mucho reservará a Héctor Moreno, que ha arrastrado una sobrecarga esta semana. El resto será el equipo de gala, con Sergio García y Caicedo como puntas de un iceberg muy sólido.

También cohesión y mayor fondo de armario darán, pero al Valencia, Feghouli y Piatti, que regresan. Alcácer apunta a titular junto a Negredo o Rodrigo. Todo ello sin Otamendi, un líder. Como debería serlo Nuno, discutidísimo esta semana y que está obligado a mejorar lo ocurrido en el Espanyol-Valencia de la Copa justo un día después de su renovación.

Caicedo, en racha, vuelve a amenazar a los ché

Seguramente resultará la principal amenaza para el Valencia, pues fue el autor de los dos goles con los que el Espanyol les apeó de la Copa del Rey. Pero Felipe Caicedo, que esta tarde apunta a titular de nuevo, tiene un idilio con el Power8 que va mucho más allá de aquella eliminatoria. El ecuatoriano, que no ha anotado ningún gol a domicilio, encadena sin embargo en casa la friolera de siete partidos seguidos (entre Liga y Copa) viendo portería rival en casa. Comenzó contra el Levante, el 30 de noviembre pasado, y siguió anotando ante Granada, Eibar, el citado Valencia, Celta, Sevilla y Almería. Son ocho los goles que acumula en ese periodo, que hoy espera aumentar.