Así están los protragonistas del plan B

Así están los protragonistas del plan B

Villa: ayuda la marcha de Villalonga. El Valencia no lo vende por menos de 40

Ramón Calderón y su equipo de trabajo han estado toda la semana intercambiando mensajes y correos electrónicos preguntándose por la incidencia que tendrá la crisis institucional sufrida por el Valencia debido al enfrentamiento entre Soler y Villalonga. Al ganar la partida el primero, la venta de David Villa es mucho más factible y ahí está colocado el Madrid en la pole position del fichaje del asturiano. El único problema para los blancos es la cifra de salida impuesta por el mandatario valencianista: 40 millones de euros. La idea de Calderón pasa por no ofrecer más de 30 para que en el regateo el fichaje no superase los 35. Sin embargo, el Barça también ha hablado con el agente de Villa, José Luis Tamargo, y el Tottenham de Juande Ramos ha subido la puja a los 40 millones que pide Soler. Pero el pichichi de la Eurocopa prefiere el Madrid. Y Calderón lo sabe...

Van der Vaart: Schuster lo quiere ya. El Hamburgo cerrará la venta por 12 millones

En los dos últimos días se han sucedido las conversaciones entre Hamburgo y Real Madrid, que vislumbran un final feliz para el internacional holandés y para los intereses del campeón de Liga. El club alemán ha abierto una puerta al traspaso poniendo la cifra precisa para dar luz verde a la marcha de Van der Vaart al Madrid: 12 millones de euros. Esta semana, la directiva del Hamburgo rechazó una primera oferta de 6,5 millones por considerarla insuficiente, pero desde el Bernabéu replicaron subiendo a 10. Al final, los alemanes han hablado con el propio Van der Vaart, capitán del equipo, y le han reconocido que por 12 millones "te dejaremos ir al Madrid". Además, Schuster ha insistido a Mijatovic estos días que quiere ya al holandés porque valora mucho una dupla formada por Sneijder y Van der Vaart, titular en la selección oranje.­-Tomás Roncero

Robinho: renovaría para quedarse. La opción de irse al Chelsea se enfría

El gran beneficiado del Plan B sería Robinho. El brasileño regresó de vacaciones convencido de su marcha del Madrid tras saber que la llegada de Cristiano Ronaldo forzaría su venta para hacer caja. A ello se unió su decisión de no ir a los Juegos Olímpicos de Pekín, aunque al principio se plantease su negativa como un castigo de Mijatovic. El caso es que si al final no viniese Cristiano es seguro que Robinho se quedaría en el Bernabéu, por mucho que la oferta del Chelsea pudiese llegar a esos 45 millones de euros en que lo tasó el Madrid hace tres semanas. Mijatovic ha reaccionado con rapidez para satisfacer los deseos de Schuster, que cuenta con el chico venga o no Cristiano. Por eso ha ofrecido a Robinho la renovación, que firmaría antes de empezar la Liga. Pero todo depende del portugués.