La inspiración de Igor Gabilondo invalidó el formidable esfuerzo de un Valladolid que fue mejor que el Athletic con once y también con diez hombres. Intervino el extremo zurdo en los tres lances que a la postre determinaron el resultado. Fue el autor de los dos únicos goles y además inició la contra que dejó al rival en inferioridad numérica, cuando el marcador señalaba un inquietante 1-0 y aún quedaba más de media hora por delante.

Los sucesivos palos que recibió el conjunto de Valladolid no fueron óbice para que desplegara el mejor juego que ayer se presenció en San Mamés. Fútbol, intensidad y una moral a prueba de bomba. Tanto esto es así que prácticamente dos tercios del encuentro se desarrollaron en terreno local.

El primer acierto de Gabilondo hizo pensar en un partido llevadero para los de Caparrós, pero lo cierto es que Armando estuvo muy ocupado toda la tarde. El elevado número de llegadas violetas contrastó con el elevado índice de efectividad rojiblanca en el remate.

El Athletic nunca estuvo tranquilo, ni su afición. Así que cuando el árbitro añadió siete minutos se montó una buena bronca. Los de Mendilibar perseveraron hasta el último suspiro, buscaron el gol con un ahínco encomiable, pero tropezaron por culpa de su despiste inicial y un grave error de Asenjo en el 2-0. El Athletic, sin gloria alguna, sumó tres puntos irrenunciables en su pelea por distanciarse de la zona de descenso.

Mendilibar: "Nos tratan de quitar la vida"

"Podíamos haber sacado algo más. Entre que hemos estado un poco pardillitos en el primer gol y no hemos tenido el acierto en los remates, se nos han ido los puntos. El Athletic es un equipo difícil de parar porque mete muchos balones arriba a Llorente y Aduriz. En el segundo gol, creo que se han llevado el balón con la mano, pero como pequeñitos que somos, no nos pitan nada. Nos tratan de quitar la vida, pelearemos hasta el final".

Caparrós: "Armando estuvo a gran nivel"

"Nos falta la confianza de tener más la pelota y generar fútbol, pero lo que importa es ganar, los puntos y que queda un partido menos. La primera jugada ha sido muy importante y luego Armando ha estado a un gran nivel. A lo mejor ha podido haber más goles, pero en ambas porterías. ¿El segundo gol de Gabilondo? A mí también me han comentado que podía haber un penalti o una segunda tarjeta a Álvaro Rubio".

El detalle. Una banda más que caliente

Joaquín Caparrós y José Luis Mendilibar le hicieron trabajar de lo lindo al cuarto árbitro. El asturiano Espiñeira Pello tuvo que lidiar sin pausa con ambos técnicos, cuyas quejas y protestas no cesaron, en ocasiones al alimón, desde el pitido inicial hasta el último. Un suplicio.