Puyol da la cara y Barça y Valencia miran la de Mourinho

Puyol da la cara y Barça y Valencia miran la de Mourinho

Puyol vuelve a dar la cara en situaciones que le disgustan. No le viene de nuevo. Ya fue una de las referencias (entonces emergente) de aquel delirante Barça de Gaspart. Fernando Hierro, al loro, le acercó al Madrid. Pero ni él ni Florentino, entonces al mando, se atrevieron a dar el paso. Añadido a lo de Figo, la Tercera Guerra Mundial hubiese sido inevitable. Y tampoco es eso.

Puyol da la cara por colegas que no interpretan el fútbol (ni la vida) como él. Lo suyo es caer con las botas puestas porque el rival, casi siempre el Madrid, es mejor. Pero empatar en Bilbao "porque nos encerramos mucho", le desquicia. Y Ronaldinho. O lo último de Deco, ¡qué pena portugués, con lo bueno que eres!

Luego está lo de Mourinho, tocado por el Valencia y a la espera de saber qué pasa con Rijkaard. Un señor que se lleva un palo tras otro y eso que tiene al equipo vivo en las tres competiciones. Bueno: en una lo tiene malheridísimo y su defunción ahí es cuestión de tiempo. Pero ya se sabe que hasta el rabo todo es toro. En los toros y en la Liga.

En círculos barcelonistas se asegura que la mayoría de la junta de Laporta está en contra de la llegada del llamado Mou al banquillo azulgrana. Laporta sí está por la labor y Cruyff podría dar su brazo a torcer aunque nunca Mourinho fue de su agrado.

La oposición está que trina. Un Barça presidido por Laporta y entrenado por Mourinho tendría poca categoría, sería lo más parecido a la Peña Bufanda. Eso se piensa en influyentes círculos culés a la espera del amenazante Villarreal, mañana en el Camp Nou.