Ver jugar a Italia engorda. Cada poco te levantas y vas a la nevera, si estás en casa. Al bar más próximo si te pilla en el estadio. O te has aprovisionado ya de chucherías, pues conoces el paño. Sí: Italia mediante, "noventa minuti son molto longos", añorado Juanito. Entre uno y dos kilos por partido aumentas fijo, picando de aquí, de allí Está científicamente comprobado.
Ayer no fue la excepción. Malo para la cintura de uno si Italia marca pronto y lo hizo a los seis minutos. A bodas me convidas. Shovkovskyi se comió (¡confirmada la teoría!) un zapatazo de Zambrotta. El tanto abrió la puerta del triunfo de la azzurra, que manejó el partido como sabe y le gusta, a favor del viento. Tapando todos los pasillos posibles hacia Schevchenko hasta aburrirle. El ausente Nesta se quedó a media reflexión cuando la víspera dijo aquello de "Sheva conoce a los centrales italianos mejor que nuestras madres". Le faltó añadir: "Y nosotros a él, más que toda su familia". Con el golito a favor, entre Cannavaro y Barzagli le sometieron a una vigilancia pecho-espalda imposible de superar. Hubiera necesitado el 7 ucranio mediocampistas de más calidad.
Más calidad. Tymoschuk y compañía son voluntariosos, pero de escaso talento. Y a voluntad, al general Gatusso y sus soldadesca no les gana nadie. Le bastó a Italia la batuta de Totti, el olfato de Toni, dos manos de Buffon y la atención del resto para dominar un partido que confirmó lo esperado: era el cuarto más desequilibrado. Italia no es la caraba, pero con ventaja en el marcador, Ucrania no le gana ni jugando con doce. Porque cuando lo intentó, de vuelta del descanso, no tuvo remate ni suerte. Buffon casi se rompe la crisma al golpearse con el palo para despejar un cabezazo picado de Gusin. Gusev falló una llegada clara ante el meta italiano cuyo rechace remató Kalinichenko y repelió Zambrotta bajo palos. A la jugada siguiente marcó Toni el 2-0, tras 'platanito' de Totti. Del 1-1 al 2-0. Ciao Sheva, 'caro amico', hola Alemania. Alemania-Italia, primera semifinal. Suena bien. Una reedición de la final del Mundial de España en 1982. Será el martes en Dortmund, a partir de las nueve de la noche.
La fiesta italiana continuó con el segundo tanto de Luca Toni, cautivo y ya desarmado el ejército amarillo. Cuando Luis Aragonés habla de saber competir, suponemos que se refiere a lo que hacen los italianos, incluso los argentinos, sin fortuna esta vez. Totti se bastó para llevar a su equipo a las puertas de la final.
Su cruce era de dulce y tras 'lo' de Medina Cantalejo ante Australia en octavos no iba a fallar. Al final, pancarta de los ganadores para Gianluca Pessotto. Cuentan que la escribió Del Piero.
El detalle: Cábalas y un gol en contra
Según los italianos, en este Mundial llegarán a la final. Según sus cuentas lo hacen cada 12 años. Estuvieron en la final de México 70 y perdieron frente a Brasil. También en la de España 82 y la ganaron frente a Alemania. En EEUU-94 volvieron a caer ante Brasil. Los 12 años se cumplen en 2006. De momento, Italia sólo tiene un gol en contra en cinco partidos. Y lo metió Zaccardo en propia meta.
