En Leganés marcó su primer gol con el Getafe. ¿Se ha quitado un peso de encima?

No soy un goleador. Hice un gol bonito y que nos sirvió para tranquilizarnos y acabar ganando el partido, así que es una buena alegría. A ver si llegan muchas más. La verdad es que en Leganés me encontré muy bien, el mejor día desde que estoy en el Getafe.

Y empieza a ser titular, no va mal la cosa

Sería un error por mi parte creerme titular. Queda mucho trabajo y lo importante es estar ahí cada día durante la temporada. Hay competencia, ganas de jugar todos los días y una buena plantilla; así que, a currar.

Hay buena plantilla, pero ¿lo normal es que toque sufrir?

Estamos preparados para ello. Somos un equipo humilde y con presupuesto corto, pero haciendo las cosas bien pienso que podemos lograr algo importante. Le aseguro que la ilusión no nos falta. Éste es un reto bonito e importante para todos y como tal lo hemos tomado. Habrá equipos más poderosos, pero nosotros no pensamos en eso. Queremos ser nosotros y llegar hasta donde podamos.

Su adaptación al equipo, ¿cómo va?

Es la primera vez que salgo de Sevilla, pero está siendo fácil. Estoy a gusto en el equipo y en la ciudad. De momento, todo va bien. Hay muchas ganas y un gran grupo preparado para trabajar. Eso lo facilita todo y de momento estoy encantado.

¿Qué espera de esta temporada?

Tengo una espina clavada. He venido a Getafe para ser el Gallardo que era antes. El que hacía cosas importantes en los primeros años en el Sevilla. Aparte de los objetivos colectivos, yo quiero demostrar que soy un jugador que puede triunfar en esta categoría y ayudar a este equipo para que pase su primer año en Primera División con alegrías. Por trabajo no va a ser y por ganas, tampoco.