EI Nàstic de Tarragona sigue volando hacia la permanencia.El conjunto grana venció al Valladolid gracias a la ambición y a la pegada de Álvaro Vázquez y a la solidez de Dimitrievski. El delantero ajustició al conjunto de Luis César con un gol en el 88’ y permite a su equipo sumar, por segunda vez esta temporada, dos victorias consecutivas.
El encuentro se inició con un ritmo parsimonioso, y todo el peligro llegó con acciones de estrategia. En el 12’, Kakabadze pudo hacer el 1-0 al aprovechar un error de concentración de la zaga de un Valladolid que estaba con una marcha menos, pero remató alto. Míchel no aparecía y Mata no tenía balones aprovechables. Con el paso de los minutos, el Nàstic quiso subir las pulsaciones al partido, pero le faltó acierto en los últimos metros para poner bajo el foco a Masip. Eso sí, la zaga blanquivioleta seguía dando facilidades al equipo grana y, en el 33’, tras la falta de contundencia de Calero, Álvaro Vázquez dispuso de una buena ocasión. Pero el delantero grana no le pegó bien balón y Masip tampoco tuvo que esmerarse en exceso para pararlo. Ya en los últimos minutos de la primera mitad, y con Ontiveros en la banda izquierda, el Valladolid se adueñó de la posesión, pero no inquietó a Dimitrievski.
Tras el descanso, el Nàstic apareció de forma fulgurante y Muñiz y Maikel Mesa dispusieron de ocasiones muy claras de gol. Ante el asedio tarraconense, Luis César optó por mover ficha y dio entrada a Gianniotas, suplió a Ontiveros, y en su primer balón pudo hacer el 0-1. Pero la gloria estaba reservada para Álvaro Vázquez y Dimitrievski.El punta hizo el 1-0con un disparo cruzado (quizás buscó centrar, pero el balón se coló en la portería de Masip) y el portero se hizo inmenso, en el 91’, para detener un mano a mano con Jaime Mata. El atacante pucelano pudo rescatar un empate para su Valladolid, pero vuelve a casa a cero y con el playoff a tres puntos.