Neymar desató la locura en el Parque de los Príncipes en su presentación ante la afición antes del PSG-Amiens: "Estoy feliz, para mí es un gran desafío".
Desde el viernes, en París, no se habla de otra cosa. Fichado por 222 millones de euros, Neymar se ha convertido en 24 horas en el rey de la ciudad francesa. Si ayer el brasileño fue presentado delante de la prensa donde explicaba las razones de su llegada en el país galo, hoy le tocaba citarse con su nueva afición. Sin permiso para jugar contra Amiens por un documento que no llegó a tiempo de federación española (debutará ante el Guingamp), el futbolista se vistió de corto, llegó al césped bajo un clamor increíble dio unos toques al balón antes de que comenzara el partido entre el PSG y el Amiens.
En un estadio casi lleno solo por verle - el encuentro empezaba una hora y cuarto más tarde - con la música del dj Martin Solveig, Neymar llegó sonriente, se persignó, aplaudió al público y se reencontró con el presidente parisino, Nasser Al-Khelaïfi. Bajo los "Neymar, Neymar" que venían desde la grada, el auriverde pronuncio pocas palabras, pero enamoro al Parque de los Príncipes: "Estoy muy feliz, para mí es otro gran sueño, un gran desafío. Tengo la voluntad de ganar títulos con vosotros, necesitaré vuestro apoyo. Vine aquí para hacer historia", dijo Neymar antes de lanzar dos palabras en francés: "Paris est magique" (Paris es mágico) y el tradicional "Ici c’est Paris" (Aquí es Paris).
Justo después de hablar, el brasileño dio una vuelta al estadio con niños y lanzó balones en las tribunas. El brasileño terminó su presentación delante la tribuna Auteuil y no dudó en lanzar su camiseta antes de volver a los vestuarios. Habrá que esperar un poco por ver jugar a Neymar su primer partido con el PSG, pero la afición ya esta conquistada.
