Cervera tendrá que buscar soluciones para cubrir las bajas
La baja de Aridane por sanción, y la posible ausencia de Álvaro García por lesión, obligan a Cervera a buscar soluciones de cara a la visita al Huesca.
Comienzan a aparecer flaquezas en el Cádiz. Es normal, pues no hay que olvidar que su plantilla se confeccionó con el objetivo de lograr, lo antes posible, la salvación y tener un final de temporada tranquilo, sin pasar por apuros. Conseguir los 50 puntos, meta marcada al comienzo de temporada, comienza a pesar en las piernas.
Si hace unas semanas era Jon Ander Garrido quien entraba en la enfermería al sufrir una rotura en los isquiotibiales –ya recuperado-, ahora es Álvaro García quien se encuentra entre algodones para estar cuanto antes al servicio del equipo. El extremo de Utrera sufrió un golpe en el tobillo y se ha estado ejercitando en solitario, por lo que parece que Cervera no arriesgará y le dará descanso en el duelo del sábado ante el Huesca. Mismo descanso que ha otorgado a Brian Oliván, del cual se desconoce cuándo regresará.
Para cubrir la baja de Álvaro García, si finalmente no llega al duelo de El Alcoraz, Cervera se encuentra con dos opciones muy claras para la posición de extremo izquierdo. Aitor García y Jesús Imaz son los que podrían cubrir esa baja. El primero de ellos ha acostumbrado a participar como revulsivo, mientras que el catalán, llegado en el mercado invernal, sigue buscando su sitio entre la mediapunta y la banda izquierda.
Además, Cervera tendrá que tomar otra decisión en el centro de la zaga, ya que Aridane Hernández vio la cartulina roja el pasado fin de semana ante el Lugo. También tiene dos opciones para este hueco, ya que la pelea para salir de inicio se discute entre Servando y Migue González. Al igual que se aviva la pelea en el centro del campo al contar el entrenador cadista con todos los jugadores de esta parcela. José Mari, Abdullah, Garrido y Eddy Silvestre, disponibles.
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