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DEPORTIVO 1 - ATLÉTICO 1

El Atlético uno a uno: las dudas de Oblak anularon el buen inicio

El error del esloveno que propició el gol de Andone hizo al Atlético jugar a remolque. Koke tampoco tuvo su noche. Thomas, Gaitán y el golazo de Griezmann, las notas positivas.
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El Atlético uno a uno: las dudas de Oblak anularon el buen inicio
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Oblak. No tuvo una feliz actuación en Riazor. El error grosero que aprovechó Andone para adelantar al Depor estuvo acompañado de varias dudas y nervios cuando entró en contacto con la pelota. Especialmente dubitativo con los pies. Se entonó sobre un remate de Sarabia, pero nunca transmitió la seguridad que acostumbra.

Vrsaljko. Se entendió bien con Correa y Thomas durante los buenos momentos colchoneros al inicio de choque. Dejó un buen número de subidas en la primera parte, sin que dejar espacios a su espalda. Tras el descanso alternó aciertos y errores.

Giménez. El gol de Andone no le es achacable directamente porque no esperaba el error de Oblak en el saque de puerta, pero al menos pudo estar más alerta para advertir esa posibilidad. La pelota le sorprendió y no acertó. Después no se entendió con el esloveno en una pelota con ventaja sobre Andone pero, ante la duda de Oblak, intervino bien enviando a córner. Discreto.

Godín. Andone metió en muchos problemas a toda la zaga atlética, cierto es que caía menos por su zona, pero faltó la conexión necesaria con su dupla para anular al ariete deportivista. Se le vio también algún error en el despeje pero igualmente estuvo oportuno en otras como cuando en el 59’ se cruzó sobre el propio Andone cuando éste había superado a Giménez y a Vrsaljko.

Filipe. Fue creciendo hasta el final de primer tiempo. Jugó bien en transición, con buenas conducciones como la del minuto 31 que no encontró rematador. Sin embargo, le faltó algo de intención en algún centro. Su partido se resumió en la horquilla de los minutos 67 al 70, donde fue capaz de llegar y disparar al poste y en la siguiente se relajaba en el retorno y obligaba a Godín a cubrirle las espaldas en un centro que casi acaba convirtiendo en gol Andone.

Thomas. Fue el jugador con las ideas más claras de todo el equipo durante el primer acto. Con precisión en corto para combinar de primeras y acelerar el ataque y con visión para filtrar pases perpendiculares como el que le metió a Correa en el 32’. La vuelta al 4-4-2 en el segundo tiempo le apartó de la zona de tres cuartos y, viendo lo que generaba, Simeone decidió hacerle jugar de Koke.

Koke. Partido muy gris el suyo, sin mucho peso en el juego ni presencia para imponerse. Su participación fue incluso a menos durante la segunda parte y ante su intrascendencia Simeone, sin titubeos, decidió sustituirle con buen criterio. Thomas pasó a llevar el peso de iniciar el juego colchonero.

Gabi. Aguantó bien el tipo esta vez sin la habitual ayuda de Koke. Cuando el partido se descontroló intentó sosegarlo, no mandó pero intentó que el equipo no se descubriera en exceso cuando tuvo que irse a por el empate. Vino bien su experiencia en la recta final.

Correa. Perdió un buen número de balones, pero no es menos cierto que se empeñó en exigir en cada acción a la zaga local, quizá con un punto de precipitación a veces. El problema con él sigue siendo la consistencia, apariciones, buena actitud, pero a veces intenta imposibles que dispara su número de pérdidas.

Gameiro. Comenzó bien, buscándole las vueltas a Sidnei, con acelerones, pero de pronto se frenó. No hubo noticias de él hasta la última jugada de la primera parte cuando sí ganó por velocidad a toda la defensa gallega hasta que fue derribado. Esta acción no tuvo continuidad y Simeone decidió cambiarle.

Griezmann. El 4-3-3 inicial le obligó a partir desde el costado izquierdo recordando tiempos pretéritos. Se asoció poco con la pelota ahí, al menos con opciones de dañar al Deportivo. Las variantes del Cholo le fueron acercando al área y al gol. Sin brillar, sin sembrar demasiado peligro, se sacó un zurdazo de primeras espectacular que le dio un punto al Atlético.

Gaitán. Con él el Atlético encontró el toque y la precisión entre líneas que le estaba faltando. Con apoyos cortos y moviéndose por el frente. Protagonizó unos muy buenos minutos, revelado contra la falta de oportunidades.

Carrasco. Su puesta en escena coincidió con la de Gaitán y entre los dos sacudieron el juego ofensivo del Atlético, aunque no es menos cierto que el partido se convirtió en un peligroso correcalles. Acomodó el balón para el golazo de Griezmann y jugó más por dentro que por fuera. De hecho, le costaba mirar hacia atrás, más preocupado de buscar la jugada que salvara al Atlético que de colaborar en la recuperación.

Torres. Saltó al campo por Gameiro para que el Atlético tuviera presencia en el área y se empleó bien. Primero estuvo a punto de cazar un buen centro de Vrsaljko y después obligó a lucirse a Lux con un disparo duro con la derecha. Estaba cuajando una gran actuación hasta ese desafortunado golpe que recibió de Bergantiños, que sembró de preocupación Riazor.

Sigue el partido de la jornada 26 de Liga Santander entre Sporting-Deportivo.