El Oviedo sigue en playoff a costa de un débil Llagostera
Linares (2') y Kone (25') marcaron para los ovetenses, mientras que Querol (19') hizo el único tanto visitante. El Llagostera, vigésimo, en descenso.
El Real Oviedo se ha impuesto hoy (2-1) a un Llagostera que sigue sin vencer fuera de casa y que, aunque mejoró en la segunda parte en la que compensó el dominio de los azules, no pudo sobreponerse a la gran primera parte del conjunto carbayón, que hizo gala de su potencial ofensivo.
El partido comenzó de la mejor manera para el Real Oviedo, que se adelantó con un gol de Miguel Linares a los dos minutos de juego tras un gran pase de Johannesson, que vio al delantero desmarcado y le puso el balón en bandeja para que el punta definiera ante René.
El conjunto carbayón siguió buscando el gol y los primeros quince minutos de juego fueron un recital de los de Sergio Egea, que llegaron al área rival por ambas bandas y se encontraron cómodos jugando en el campo de la UE Llagostera, que se vio obligada a contarrestar en defensa las subidas por banda de los laterales azules.
Los locales pudieron ampliar distancia en el marcador en una nueva acción de Linares a pase de Valle, que sacó René en el uno contra uno, y en un disparo de Koné, minutos después, ante el que el meta visitante volvió a reaccionar de manera magistral.
Pese al dominio azul, la UE Llagostera consiguió el empate en su primer tiro a puerta y lo hizo tras un pase largo de Chus Herrero a la espalda de la defensa que dejó a Querol solo frente a Esteban, al que el punta regateó con acierto y envió el balón al fondo de la portería.
El Real Oviedo no se echó atrás y encontró el segundo tras córner sacado por Hervías en corto que peinó Vila en el primer palo y remató Koné en el segundo para adelantar de nuevo a su equipo.
Los locales jugaron con determinación y profundidad, dominando al rival y haciendo eficaz su posesión de balón al atacar y defender con el balón en los pies, pero las ocasiones claras de Borja Valle, de lo mejor en la escuadra azul, no fueron suficientes para ampliar el resultado en favor de los carbayones.
Tras la reanudación, la UE Llagostera salió más metida en el partido y ganó metros, por lo que, sin llegar a crear muchas ocasiones de gol, sí se acercó más a las inmediaciones del área de Esteban, aunque eso implicara correr riesgos atrás, donde el técnico Alsina llegó a situar una defensa de tres.
El partido perdió intensidad y ritmo debido a la relajación en el juego del Oviedo y los catalanes siguieron intentando empatar con jugadas a balón parado y alguna acción individual, como una internada de Querol en el área que no acabó en remate porque el balón se le va largo en el control.
Egea dio entrada a Bedia y Aguirre, para dar frescura al centro del campo y a las combinaciones por banda, y los visitantes lo intentaron en el área con Imaz y con algún tiro lejano de Pitu desde fuera, pero no consiguieron poner en verdaderos problemas a un Oviedo que controló el partido pese a lo ajustado del resultado.