Willian da un respiro a Mou

El Chelsea logró una victoria balsámica por 2-1 ante el Dinamo de Kiev en un partido con dos caras para el discutido José Mourinho, plácido durante la primera mitad pero de infarto desde el descanso.

El equipo blue empezó con la intensidad que marca Willian, su mejor futbolista otro vez más, y aunque poco a poco fue bajando las revoluciones encontró el premio del gol a los 34 minutos gracias a una desafortunado cabezazo en propia puerta de Dragovic tras un centro al área del brasileño. Los ucranianos, inofensivos en los primeros 45 minutos, salieron rejuvenecidos del vestuario y forzaron a los blues a un intercambio de golpes que pudo acabar tanto en el 2-0 como en el empate. La balanza se decantó primero del lado de los visitantes con el empate del propio Dragovic pero pronto Willian salió al rescate de Mourinho con el definitivo 2-1 para arrebatar la segunda plaza a los ucranianos y acercar el pase a octavos.

La alineación de Mourinho volvió a tener sorpresa. Fábregas y Matic regresaron al campo pero a cambio decidió jugarse el partido, y gran parte de su futuro, con Hazard en el banquillo. La apuesta aunque controvertida tuvo un inicio prometedor. El Chelsea, como ante el Liverpool el pasado sábado, salió con todo a por la victoria y a lomos de un Willian superlativo. El gol, no obstante, se resistió más de lo esperado y los blues fueron poco a poco dejándose ir como llevan haciendo toda la temporada. El brasileño despertó entonces al equipo con una buena jugada por la banda que terminó en un centro al área y en el tanto en propia de Dragovic. Costa, justo antes del descanso, tuvo el 2-0 justo antes del descanso pero cuando cabalgaba hacia el área de Shovkovskiy se quedó falto de fuerzas y acabó por los suelos y pidiendo un penalti que no existió.

El Dinamo respondió con un inicio de la segunda parte eléctrico. Zouma evitó el mano a mano de Krayets ante Begovic con una entrada sublime y Baba Rahman frenó también con cierta fortuna un disparo con peligro de Yarmolenko. El Chelsea se enzarzó entonces en un peligroso vete y ven que también pudo regalarle la sentencia. La tuvo Willian, en un cabezazo a las manos de Shovkovkiy tras pase de Costa, y la acarició Zouma tras fallar desde dentro del área pequeña un disparo que se llegó a cantar como gol. Moraes puso también en aprietos a Begovic y Oscar hizo lo propio con Shovkovkiy pero al final fue Dragovic en el minuto 77 el que se llevó el gato al agua para resarcirse de su gol en propia con el tanto del empate, tras encontrar un balón perdido por el área después un error de Begovic.

La soga se acercaba a cuello de Mourinho que recurrió entonces a Hazard para tomar aire. Willian, no obstante, fue otra vez su salvador con un lanzamiento de falta magistral que permite al portugués tomar aire. Y al Chelsea acercarse a los octavos.