El Alavés y el Leganés se olvidan del juego ofensivo
El buen planteamiento del equipo madrileño fue suficiente para anular la capacidad de presión que en partidos anteriores había mostrado el Alavés.
El Alavés y el Leganés firmaron un empate sin goles después de noventa minutos de fútbol insulso y carente de ocasiones de gol ante ambas porterías.
El buen planteamiento táctico del equipo madrileño fue suficiente para anular la capacidad de presión que en partidos anteriores había mostrado el Alavés.
Así transcurrió la primera media hora del encuentro, sin aproximaciones peligrosas de ninguno de los dos bandos.
Un centro desde la izquierda de Guichón, a la media hora, desviado por Serantes junto a su poste derecho, fue la ocasión más peligrosa de los locales.
El Alavés tuvo la mejor oportunidad tres minutos antes del descanso. Un saque de falta fue rematado por Guichón a un poste y el posterior disparo de Borda lo desbarató Serantes con una acrobática intervención.
El Leganés esperó al último segundo para llevar peligro a la portería de Pacheco. Omar Ramos disparó raso desde la frontal del área un balón que salió pegado a la base de un poste.
No se modificó el planteamiento ni la decoración tras el intermedio, con un Alavés que tenía el balón sin saber cómo contrarrestar el orden del Leganés.
En un intento de tener mayor circulación y rapidez con el balón, el técnico local dio la alternativa al último fichaje albiazul, el húngaro Krisztián Vadócz, a la hora de juego.
Hubo respuestas desde el banquillo visitante con la entrada de Szymanowski y Borja Lázaro como hombres de más calidad y con la intención de dar un paso adelante, pero las líneas del centro del campo de ambos equipos fueron incapaces de hilvanar más de cuatro pases seguidos.
Los locales quemaron sus últimas bazas con postreros disparos de Femenía y Raúl García que no supusieron un gran sobresalto para el meta visitante.