Jugó Diego Costa, le dio el triunfo al Chelsea y se fue lesionado

Diego Costa dio los tres puntos al Chelsea ante un Liverpool al que no le sirvió de nada descansar a siete de sus titulares contra el Real Madrid. Porque al equipo de Brendan Rodgers apenas le duraron las pilas media hora y pese a adelantarse en el marcador y a un buen arreón final acabó sumando su tercera derrota consecutiva (tras las de Newcastle y Madrid) después de los goles de Cahill y Costa. Así mientras el Chelsea da otro paso más hacia el título de la Premier League los de Merseyside quedan a 15 puntos del liderato. Así, mientras Costa descansará con la Selección la próxima semana, volvió a ser determinante para dar la victoria a su equipo.

El Liverpool salió con efervescencia al partido y el trivote formado por Gerrard, Henderon y Can logró por momentos borrar del mapa a la brújula blue de Cesc Fabregas. Y mientras Sterling y Coutinho metían una doble marcha al partido en cada balón que agarraban por las bandas, Can logró traducir el buen inicio local en el 1-0 con un buen disparo desde la frontal en el minuto nueve.

Pero la alegría de Anfield fue efímera. El Chelsea, a falta de fútbol, respondió con el balón parado. Cesc puso un córner y tras un cabezazo de Terry y el barullo posterior, Cahill rebañó el balón para hacer el empate (con necesidad de recurrir a la tecnología en línea de gol para comprobarlo).

El equipo de Brendan Rodgers fue poco a poco diluyéndose a causa del empate al tiempo que el Chelsea hacia lo contrario. Mourinho desconectó a Alberto Moreno alineando a Ramires en el extremo y con Balotelli una vez más desaparecido todo quedaba en la velocidad de Coutinho y Sterling. Mientras tanto, Diego Costa se peleaba en cada salto con Skrtel y Hazard mandó un par de avisos de calidad en al contragolpe. Nada especial. El partido llegó al descanso en empate.

En la segundad mitad el Liverpool intentó volver a tomar el mando a base de posesión. Pero el Chelsea, con menos, creaba más y así en el minuto 67 desequilibró el encuentro con el gol de Costa. William, que había entrado por Ramires, vio una autovía para Azpilicueta en la banda izquierda y el lateral español, convertido en extremo, dejó la jugada del partido con un autopase genial a su defensor y un centro con el exterior que tras un ligero toque de Mignolet encontró a Costa en el segundo palo. El delantero blue, en su línea, la mandó a las redes para anotar el 1-2 y su décimo gol en solo nueve partidos de Premier League. Luego se fue tocado en un tobillo.

El Liverpool se agarró entonces a Anfield, al mítico The Kop y a su capitán, Steven Gerrard, para volcarse en el área blue en busca del empate. Y lo tuvo cerca con un disparo de Gerrard que encontró la mano de Cahill en su camino hacia las redes de Courtois. Pudo ser penalti pero el árbitro vio involuntariedad y el encuentro terminó con el 1-2 final. Y la pena de Brendan Rodgers. Tras tres derrotas consecutivas en una semana se avecinan nubarrones por Liverpool…