Moi Gómez y Mario aniquilan al Celta y silencian Balaídos

El Celta, invicto en las seis primeras jornadas de Liga, cosechó su primera derrota del campeonato, curiosamente, en su mejor partido. Los de Berizzo se hicieron con el dominio desde el principio y sus hombres más peligrosos, Orellana y Nolito, no tardaron en enseñar los dientes. Apenas tardaron un cuarto de hora en fabricar su primera gran jugada, pero Mario apareció en el último suspiro para evitar el tanto del gaditano.

El Celta insistió y Asenjo empezó su servicio a la patria con una parada a bocajarro tras un buen recorte de Nolito, el gran olvidado de Del Bosque. El equipo vigués estaba cómodo y los castellonenses no encontraban su sitio.

Sin embargo, todo cambió en un minuto. Literal. Moi Gómez marcó en los minutos 32 y 33. Aprovechó una gran jugada individual de Cheryshev primero y un error de Cabral después para silenciar Balaídos. Los locales quedaron muy tocados y Bruno estuvo a punto de hacer el tercero a la salida de un córner.

Reaccionó el Celta antes del descanso. Krohn obligó a Asenjo a lucirse en el 43' y un minuto después Nolito le robó la cartera a Víctor Ruiz y le regaló el gol a Larrivey, que definió bien ante Asenjo.

La segunda parte fue un asedio constante de los celestes, pero entre la fortuna y Asenjo evitaron el empate del equipo olívico. Y de lo que pudo ser, en realidad de lo que esperaba el celtismo, a la cruda realidad: Mario sentenció a placer en el último minuto tras una contra vertiginosa bien llevada por Vietto. Silencio en Balaídos, homenaje de los jugadores amarillos a Marcelino por el reciente fallecimiento de su padre.