NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

GRANADA 0 - LEVANTE 1

Rubén saca al Levante del pozo

Un gol suyo dio la primera victoria al conjunto granota y rompió la condición de invicto del Granada. Mendilibar dio a Caparrós de su medicina.

Actualizado a
Rubén saca al Levante del pozo
CANAL+

Cuatro partidos y medio después, el Levante cantó gol. Fue un buen tanto de Rubén García, eso sí, y valió tres puntos que alejan fantasmas y aportan mucha tranquilidad. Paradójicamente, el Levante echa a andar ante Caparrós y con su receta. Oficio, orden y sacrificio máximo. Así se labró el equipo de Mendilibar su primera victoria de la temporada.

El estreno en ataque de la temible pareja El Arabi-Córdoba acabó en gatillazo. Con el colombiano en el área, el marroquí estrenó hábitat entre líneas y jugó con libertad. Algún chispazo suyo y un par de subidas de Foulquier generaron los dos remates desviados de Córdoba que completaron la producción ofensiva de los locales en la primera parte. Con el paso de los minutos El Arabi se diluyó y el Granada no encontró argumentos para acercarse a Jesús.

Mendilibar trata de recomponer a su equipo desde la firmeza defensiva. Y en Los Cármenes encontró el Levante el punto de fiabilidad que le había faltado en los cuatro primeros partidos. Rubén García y Morales lideraron algún escarceo para incomodar a Roberto. Pero el Levante no soltó amarras hasta después del descanso. Caparrós sorprendió quitando a Iturra en el intermedio y los valencianos encontraron un agujero en el eje rojiblanco. Por el centro se coló Rubén nada más reanudarse el choque y, tras sortear con suma facilidad a Babin, la puso imposible para Roberto.

El Granada, irreconocible, no tiró entre los tres palos ni una vez y fue incapaz de generar siquiera inquietud en su rival. Caparrós agotó los cambios (entraron Juan Carlos y Success), pero su equipo se atragantó con el balón y todo quedó en manos del balón parado. El Levante se puso el traje de contragolpeador, minimizó riesgos y vivió un plácido final de partido. Caparrós probó de su propia medicina. Mendilibar respira.