REAL MADRID
La presentación de Bale en el Madrid, condicionada por Gales
Si el club no logra que el Tottenham dé su brazo a torcer este fin de semana, Bale tendrá que irse con su país para jugar dos partidos y no regresaría hasta el 11 de septiembre.
Si el fichaje de Gareth Bale se alarga hasta el lunes, la fecha en la que se cierra el mercado, el Madrid no podrá presentar a la estrella galesa hasta el 11 de septiembre, tras el parón que concede la FIFA para que jueguen las selecciones.
El entrenador de Gales, Chris Coleman, ha citado al objetivo blanco el próximo martes para preparar los dos partidos que disputará su país el 6 de septiembre en Skopje (contra Macedonia) y el día 10 en Cardiff, en este caso contra Serbia. Ambos encuentros son oficiales (pertenecen al grupo A de la fase de clasificación para el Mundial), por lo que el aún futbolista del Tottenham no podría pedir una dispensa para faltar al primero y ser presentado en el Bernabéu, una opción que sería negociable de haber sido un choque amistoso.
Aplazar la multitudinaria presentación de Bale al miércoles día 11, nueve días después de que ya fuera oficialmente jugador madridista, no tendría el mismo efecto a nivel mundial que ahora, con el boom de la noticia y como colofón casi planetario al mercado veraniego.
Levy. Este es el temor en la entidad blanca, que Daniel Levy siga alargando hasta el último día posible las negociaciones como método para 'castigar' al Madrid por gestos que no le han gustado en la última semana: engalanar el palco de honor del Bernabéu, preparar las camisetas blancas con el '11' y el nombre de Bale, que Florentino apareciese por Marbella justo cuando el británico fue allí a pasar dos días de vacaciones la semana pasada
Un fichaje que se dilata también por razones más prosaicas. El presidente de los Spurs afronta esta partida de cartas con el Madrid mientras, entre bambalinas, negocia fichajes para su equipo con el dinero que ingresará por Bale. Tras Lamela (30 millones al Roma), hoy firmará al rumano Chiriches (Steaua de Bucarest) y tiene encarrilado al danés Eriksen (Ajax), pero insiste en no dar vía libre al Madrid para alcanzar un acuerdo por Bale al cien por cien mientras no los cierre. No quiere que los titulares en la prensa con los 90 millones que pagará el Madrid por el galés encarezcan esas adquisiciones que gestiona en paralelo.
De hecho, aunque Levy viajó el pasado miércoles junto con el director deportivo spur, Franco Baldini, a Amsterdam, el Ajax no transige con la oferta de 10 millones del Tottenham y se ha descolgado pidiendo 15 por su futbolista...
Mientras, en el Madrid siguen mostrándose confiados en que Bale jugará en Chamartín. Lo dijo ayer el vicepresidente primero, Fernando Fernández-Tapias, a su llegada a A Coruña para representar al club en el Teresa Herrera: "¿Que si se va a fichar Bale? Yo creo que sí, pero vamos a esperar porque están dándonos largas...".
Un mensaje que confirmó la oposición que sigue teniendo el Madrid en la figura de Levy, un durísimo negociador, aunque Fernández-Tapias reiteró su mensaje de optimismo: "Aún hay problemas, pero creo que al final no los habrá".