Mou: "Yo entrené al verdadero Ronaldo, al brasileño, no a éste"

—Primero, el Madrid no depende de la inversión de un propietario, de un presidente. Es un club que tiene una situación fantástica económicamente, por eso sí puede, compra. El Madrid compra y cuando compra, paga, y por eso es uno de los clubes que tiene el derecho a comprar y el derecho a hacerlo por números que para muchos son astronómicos y criticables, pero el Madrid económicamente es poderoso y puede perfectamente hacerlo.

—Sí, lo pensé.

—Sí.

—Que no era el momento ideal, de invertir tan fuerte. El año pasado hicimos mucha menos inversión, ni la mitad de este año, pero son momentos diferentes. Me alegro que el Madrid pueda comprar un fantástico jugador.

—Pregunté al Madrid si podíamos comprarlo la última temporada, pero no fue posible. Parece que va a ocurrir este año, y estoy contento por ellos porque van a conseguir un fantástico jugador. Se habla de números enormes, por lo que el chico estará sometido a gran presión para comprobar que fue una buena inversión.

—Creo que es un fantástico jugador y en mi Madrid estaría jugando. Creo que es un jugador que ocupa espacios con facilidad y también a la hora de introducirlo en una dinámica táctica. No sé lo que Carlo está pensando ahora, pero es un entrenador con experiencia, y seguro que consigue lo mejor de él.

—¡No! Porque es un club especial. No es el Chelsea. El Madrid es política. No es fútbol, no es deporte, es muchas cosas alrededor... En el segundo año fuimos los campeones, fuimos los mejores en la historia de España. Hicimos 100 puntos y 126 goles. En el tercero hubo elecciones, y las elecciones en ese club significan mucho. Te encuentras en medio de algo que no es normal y que sólo puede entender la gente que está dentro. La temporada no fue tan mala. Llegamos a la final de Copa que perdimos y llegamos a las semifinales de la Champions, un gol es la diferencia de no jugar la final. Ganamos trofeos, vencimos al Barcelona en la Supercopa.

—Yo voy a ganar, espero ganar, como gané la primera vez, construyendo. No obsesionado con el hoy, pensando también en el mañana. Lo que hemos hecho aquí en el 2004 y 2005 ha durado muchos años, porque analizas el equipo del Chelsea después de 2005-06 y llegas a 2012 y todavía tienes una estructura de equipo que venía de cuando empezamos en 2004. Voy a intentar hacer lo mismo. Tenemos un equipo muy joven, titulares con 20 y 22 años, significa que tienen diez años por delante. Este equipo tiene un porvenir fantástico.

—En pocas semanas estará jugando una Supercopa de Europa, en la que está el Chelsea por los triunfos de Benítez.

—Hay otros entrenadores que jugaron Supercopas que debería haber jugado yo. Por ejemplo Benítez ha jugado la Supercopa con el Inter que debería haber jugado yo.

—Pero se fue al Madrid...

—Y Benítez se fue al Nápoles. Pero yo he dejado al Inter campeón de Europa y Benítez ha jugado con el Inter, el Mundial de clubes, la Supercopa de Europa y la de Italia. Y tú me preguntas a mi quién debería jugar la Supercopa. Mira bien la diferencia. Cómo la gente se olvida.

—Ok, él con el Inter ha jugado la final de la Intercontinental, Supercopa de Europa y la de Italia y tú me preguntas que voy a jugar una Supercopa que debería jugar Rafa. Es curioso, hasta tú interpretas las cosas de modo contrario, qué interesante.

—No cambiaría nada. Mi carrera es casi única. Entrené la primera vez en el año 2000, pero antes fui asistente en grandes clubes, con grandes entrenadores y entrenando grandes jugadores. Cuando tenía 30 años entrené a Ronaldo, no este, sino el verdadero, el brasileño. He entrenado a Rivaldo, Figo, Guardiola... cuando yo era muy, muy joven. No era el entrenador, era el asistente del entrenador, pero sentía que tuve en mis manos algunos jugadores con potencial y después de unos años gané mi primera Champions.