Florentino Pérez: toda una hora y media de fotos y autógrafos

La presencia sorpresa del entrenamiento fue la de Florentino Pérez. El máximo dirigente madridista apareció en el palco de honor del Alfredo Di Stéfano a las 15:58 horas, justo un par de minutos antes de la hora fijada como inicio de la sesión, y se dio un auténtico baño de masas.

Florentino recibió una ovación nada más salir del antepalco y accedió a posar con los aficionados que le paraban mientras descendía por la escalera en teoría hacia su asiento, pero nunca llegó a ocuparlo. Se quedó en la parte más baja del palco, en una barandilla que ejerce como separación con la grada. Allí quiso tener un detalle con los aficionados que se arremolinaron a su alrededor. Armado con una considerable dosis de paciencia y como si de un rey mago se tratase, procedió a hacerse fotos y firmar algunos autógrafos durante todo el tiempo que duró el entrenamiento, una hora y media en total.

A punto de iniciar un 2013 que acogerá elecciones a la presidencia del club en verano, Florentino atendió una cola interminable de hinchas, pese a tener que soportar una posición a veces incómoda al estar obligado a agacharse para aparecer en muchas de las instantáneas. Tras dar por terminado Mourinho el entrenamiento, Florentino atendió a unos pocos simpatizantes más pero finalmente tuvo que marcharse.

Eso fue de puertas hacia afuera. En las entrañas del Alfredo Di Stéfano, Florentino ya había repartido saludos y abrazos a los jugadores. El presidente hizo una breve visita antes del entrenamiento al vestuario para ver a Mourinho y al resto de la plantilla y desearles un feliz final de año 2012.

Apoyo. El mandatario madridista quiso dar un respaldo institucional al equipo después del descalabro en Málaga y estar presente en la vuelta de las vacaciones con la idea de hacer borrón y cuenta nueva para el año entrante.

Florentino ya se dejó ver el pasado día 23 en el Palacio de los Deportes para apoyar a Casillas durante el Partido x la Ilusión que organizó con fines solidarios el capitán, justo el día después de su controvertida suplencia en La Rosaleda según aseguró Mourinho "por razones técnicas".