NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Real Sociedad

Aperribay defiende a Montanier: no se la juega en Málaga

Se citó con el galo para exigirle. Jokin Aperribay da un golpe en la mesa. No en sentido negativo, sino buscando la reacción de sus jugadores y entrenador.

Actualizado a
Aperribay defiende a Montanier: no se la juega en Málaga

Jokin Aperribay da un golpe en la mesa. No en sentido negativo, sino buscando la reacción de sus jugadores y entrenador. El presidente de la Real, en el marco del desayuno de trabajo organizado en Zubieta para hablar de la Fundación, salió al paso de todos los rumores sobre el futuro de Phillipe Montanier. Y pudo hablar más alto, no más claro. "No nos planteamos un ultimátum en Málaga, pero no porque no vaya a ser determinante, sino porque no puedes afrontar un partido con una guillotina".

Aportó más datos para entender su decisión. "Estuve tomando ayer (por el martes) un café con Montanier, hablando, exigiéndole, pero desde luego no amenazándole. Lo que tenemos que hacer es ganar en Málaga, y alentar en casa a la afición, porque como estemos todos unidos, vamos a ganar al Rayo, Osasuna y eliminar al Córdoba, porque somos mejores".

El presidente de la Real tiene muy clara la posición de su Consejo con una posible destitución de Montanier en estas fechas. "Cuando meditas sobre el entrenador y en cambiar, llegamos a la conclusión de que no, que no sólo pasa por él. Puede haber técnicos que lo hagan mejor que Montanier y otros peor, pero hay más cosas que mejorar. Es un compromiso de todos, no de una sola persona. Tenemos que encontrar el por qué, y si el por qué de las derrotas fuera está en el entrenador, ya lo hubiéramos cambiado hace tiempo. No nos van a doler prendas en tomar ninguna decisión, y lo que vamos a defender es a la Real. No debemos precipitarnos", explicó.

Para ello, también utilizó un simpático símil, saliéndose sorprendentemente del guión. "Voy a decir con todo el cariño, yo creo que ni cuando uno se casa, está uno convencido".