Para acabar la fiesta, la foto de familia en la Almudena

El último acto institucional de celebración del Real Madrid tuvo lugar en la catedral de La Almudena, en la que la plantilla del conjunto blanco fue recibida por el cardenal Rouco Varela, arzobispo de Madrid. Iker Casillas y Sergio Ramos, los dos capitanes, y el presidente, Florentino Pérez, ofrecieron la copa de la Liga a la Virgen después de un breve acto.

"Nunca nos rendimos. Nuestra voluntad es inquebrantable", dijo Florentino Pérez en su discurso. "Estamos ante una crisis durísima, en la que el fútbol es un instrumento para crear emoción, alegría y solidaridad. Este es un grupo que forma parte de la historia de nuestro club. Con este espíritu de superación le devolveremos a la sociedad parte de lo que nos da cada día. Este club quiere contribuir a un mundo menos injusto y solidario. Y el título nos da la fuerza para seguir soñando", apostilló.

Después los jugadores posaron con el trofeo dentro del templo antes partir hacia la comida prevista en el estadio Santiago Bernabéu.