Hernán tapa a Cazorla

Quiso el Málaga, en su enorme pelea por defender la tercera plaza, ser el conquistador de un feudo que ni Real Madrid, ni Barça o Valencia pudieron profanar. Sin embargo, quien realmente ejerció ayer de Hernán Cortes, para plantar con rabia la bandera de la victoria amarilla, fue su tocayo Hernán, Pérez para más datos. Al final, en un duelo en que ambos se jugaban mucho los cuartos, así quedaron: el Submarino, por abajo, y ya con una jornada menos de sufrimiento, y los de Pellegrini cuartos tras pasarles el Valencia goleando al Rayo.

Y eso que al cuadro boquerón se le puso muy de cara el triunfo cuando, tras aguantarle muy bien los castellonenses en la primera mitad, se produjo la inevitable peladura de cables de la defensa local. Pero el gol de Cazorla, en su regreso al hogar, agridulce hogar, no fue suficiente y los de Lotina tiraron de bravura para seguir remando contracorriente.

Reflejo de esa casta fue un cañonazo al larguero de Senna, el líder a sus 36 años de este Villarreal (vaya novedad), nada más arrancar el encuentro. El hispano-brasileño sacó la zurda a pasear y la pelota tocó de refilón el travesaño, como si de una colleja o sardineta se tratara. Después, hubo un escueto toma y daca de ocasiones e Isco fue quien más cerca estuvo de marcar pero Diego López estuvo atento. El malagueño quiso sorprender al portero con un tiro lejano que, aunque raso y no muy potente, obligó al lucense a atajar en dos tiempos. Rondón, además, había cabeceado arriba un saque de falta de duda.

De vértigo. Tras la reanudación, el partido ganó interés en el 64' con el gol del añorado, y celebrado en el Málaga, Cazorla. La zaga amarilla erró y reculó y el asturiano, con un zurdazo preciso, como casi siempre, hizo el 0-1. El Submarino se volcó a por la victoria y, primero, Gonzalo falló solo un remate de cabeza y encontró respuesta en un disparo lejano y desviado de Seba. Luego, Marco Ruben erró lo imposible ante un centro de Valero pero mejor suerte tuvieron los de Lotina cuando Hernán Pérez, tras un excelso pase de Senna, fue derribado por Kameni (fue expulsado), que salió como si no hubiera mañana. Senna igualó y hubo traca final. En el 93', tras un saque de córner despejado por la zaga visitante, Hernán Pérez empalmó desde la frontal, cogiendo a Ruben adelantado, derribando al Málaga y desatando la fiebre amarilla.