Ibra: de las acusaciones a los elogios

No pudo hacerlo en el partido de la fase de grupos por unas molestias físicas, pero esta noche Zlatan Ibrahimovic volverá a jugar en el Camp Nou. Gran parte de la afición medita abroncarlo, después de sus constantes provocaciones contra Pep Guardiola, aunque con el paso de los meses su discurso rebajó intensidad y las acusaciones dejaron paso a los elogios. El sueco estuvo sólo un año como azulgrana. Comenzó su aventura siendo indiscutible y la acabó siendo el relevo de Bojan. Guardiola lo atribuyó a cosas del fútbol; él señaló directamente al preparador como principal culpable de su fracaso en España. De ahí que cuando a finales de agosto de 2010 fue traspasado al Milán, el sueco acusó a Pep de ser un "filósofo", además de asegurar que "le tenía miedo". Guardiola nunca entró al trapo. Es más, el que fuese su técnico siempre atribuyó los éxitos de la temporada (con él se conquistó Supercopa de España, Mundial de Clubes y Liga, además de Supercopa de Europa, aunque no la pudo disputar por una lesión de muñeca) en parte a su calidad. A finales del pasado verano, Ibra publicó su biografía (Yo soy Zlatan Ibrahimovic). Fue otro capítulo de bofetadas. Se abrió y dejó ir una buena suma de descalificaciones, incluyendo a algunos de sus compañeros. Dijo de Xavi, Iniesta y Messi que "parecen estudiantes que van a la escuela sin protestar nunca", todo por el cambio de rol que Guardiola hizo con La Pulga, situándolo con más libertad y con la posibilidad de hacer goles. Pero eso parece ser historia. En los últimos meses, el nórdico cambió el discurso y donde habían desconsideraciones ahora hay elogios. Ayer sin ir más lejos dijo que "Messi es todo talento mientras Cristiano es producto de entrenar mucho". Ibra en estado pudo.