"Confío en mí, ya salí de situaciones parecidas"

(Manzano tomó la palabra antes de recibir la primera pregunta). Quiero expresar en mi nombre y en el de todo el vestuario que estamos dolidos, arrepentidos y con mal cuerpo. Pero confío en mi trabajo y en esta plantilla para romper la dinámica negativa. Mañana es un día de fiesta y unión y espero que no sea de confrontación. Pido a los aficionados que ayuden a los jugadores porque van a darlo todo por ellos para que sea un día feliz y tener ese punto de arranque que todos queremos dar. Es un punto de inflexión y a partir de ahora hay que intentar subir peldaños hacia arriba .

¿Qué se han dicho en la reunión que ha mantenido usted con los jugadores?

Hemos hecho un análisis de la situación y de los últimos partidos. La situación actual es una suma de cosas. En San Mamés el equipo se desmoronó de forma incomprensible. Somos un grupo, un equipo, y sabemos que nadie nos va a regalar nada. En el fútbol si no corres durante los 90 minutos puedes verte sorprendido como en Bilbao. Hay un compromiso colectivo y sabemos dónde queremos llegar, es un mensaje que hemos trasladado en esa reunión y queremos demostrar sobre el campo.

¿Los jugadores han hecho autrocrítica?

En la reunión de los jugadores no he estado presente. No puedo contestar. La mía ha ido dirigida a los aspectos personales y profesionales. Ha sido una charla dura pero real, dentro del respeto que le tengo a toda la plantilla.

¿Teme que los dirigentes no tengan esa paciencia que usted reclama?

No temo nada, lo que hay que entender es que en el fútbol hay situaciones en las que pasan cosas que no son positivas, son rachas, y que desde ese punto de vista intento buscar soluciones para cortarla. Esta situación anormal, atípica y dolorosa que está viviendo el equipo, yo la he vivido ya y he salido de situaciones parecidas, por eso confío en mi trabajo y en el de la plantilla. Sólo necesitamos un resultado positivo para romper esta dinámica negativa.

En las imágenes se ve que Reyes, tras ser sustituido, mostró desconsideración hacia usted. ¿Va a tomar alguna medida al respecto? ¿Ha hablado con él?

No vi lo que hizo. Ha sido él el que ha hablado conmigo. Le honra como jugador. Es un chico que últimamente no le están saliendo las cosas bien. Prefiero jugadores que se enfaden por una sustitución y no se acomoden. Ha hablado conmigo y el asunto está zanjado. Prefiero que los jugadores que no jueguen tengan rabia. Me ha pedido disculpas y eso le honra.

¿Cree que hay una fractura entre el entrenador y el vestuario?

No lo creo. Estamos todos en el mismo barco y remamos en la misma dirección. No hay nada anormal.

¿Falta carácter en su vestuario? ¿Falta un jugador que en partidos como el de San Mamés salga y sea quien llame a la reacción del resto?

Hasta ahora, habíamos reaccionado en esas situaciones. En Rennes, por ejemplo. Pero en Bilbao el gol nos dejó groguis. Estábamos haciendo un trabajo digno, pero a partir de ahí perdimos la fortaleza mental y física y el Athletic nos arrolló. Es una experiencia para el futuro. Ahora no tenemos esos elementos que asuman el rol de dar el grito para que el resto no se venga abajo. Pero los tendremos. A veces hay que sacar otro tipo de genio en los partidos, a veces somos muy buena gente. Ante el Mallorca, por ejemplo, Diego recibió multitud de patadas para cortar el juego y no supimos trasladar al árbitro esa presión que sí hacen otros.