Rooney deja a Raúl sin sueño

Hacía años que no se veía una semifinal tan desigual, un resultado tan engañoso y un equipo tan superado por las circunstancias. El Manchester United dejó la eliminatoria sentenciada ayer pero podría haberlo hecho mucho antes y mucho más enfáticamente porque el Schalke defendió muy mal, nunca tuvo la manija del partido y no supo atacar. Solo eso. De hecho los de Ferguson realizaron una de las primeras partes más espectaculares que se recuerdan. Hubo de todo: desmarques, subidas por banda de los laterales, llegadas desde atrás de los centrocampistas, contraataques, paciencia para encontrar los huecos, movimiento con balón, movimiento sin balón, ocasiones, regates, paredes, defensa adelantada, disciplina defensiva, rotundidad en el despeje, orden, remates de cabeza, con la derecha, con la izquierda, de delanteros, de centrocampistas, de defensas convertidos en arietes. Y Neuer.

Hace sólo unos días anunció que deja el club de su vida como primer paso para reconocer que su destino es el Bayern, con quien está negociando. A no ser que el United utilice las dudas de De Gea para adelantarse. Ayer el joven guardameta recordó a Casillas con pies milagrosos, salidas bien calculadas, una mano aquí, una rodilla allí o manteniéndose en pie hasta que tocaba. Y también a Schmeichel con sus gestos de portero de balonmano. Sus cuatro defensores cometieron constantes errores colectivos e individuales que Chicharito pudo haber aprovechado al menos en tres ocasiones. Pero lo peor fue lo de los centrocampistas, incapaces de presionar al United.

Rooney. Y por ello se pudo disfrutar de Wayne Rooney haciendo de 10: así debe jugar en el parque con sus colegas. Marcando el ritmo, abriendo el juego, partiendo en dos la defensa rival. A lo Xavi o Cesc. Estaba siendo muy fácil jugarle al Schalke. Cuando los alemanes atacaban era porque el United se estaba tomando un respiro. Así, debió pensar Raúl, es imposible. Aunque mientras hay vida hay esperanza y eso es lo que ha llevado al Shalke a las semis. Salieron la segunda parte como si nada hubiera pasado en la primera y al poco de la reanudación se vio finalmente a Raúl tras un centro de Farfán que no consiguió rematar.

En la banda izquierda, Jurado corría tras el balón frustrado. Su equipo, por primera vez a dos partidos de la final de la Champions, era incapaz de robar un balón y de hacer la vida complicada a un Manchester que se había visto en una de estas (semifinales, goles que no llegan) en muchas más ocasiones. Cuando tenía la posibilidad de explotar el poco espacio que dejaba el Manchester United, se encontraba solo ante el peligro. Edu y Raúl esperaban rodeados de dos torres y nadie más se atrevía a descolgarse. "Concentraros, paciencia" fueron las dos indicaciones de Ferguson al descanso. El Manchester siguió, pues, a lo suyo y Rooney, de nuevo paseándose por el borde del área, vio a Giggs para abrir el marcador. A los pocos minutos, Chicharito fue el asistente y Rooney encontró fácilmente la espalda de los centrales. Con este resultado, el Schalke, visto lo visto, no sabe ni puede darle la vuelta a la eliminatoria. El United, más cerca de Wembley.