Madrid-Tottenham y Barcelona-Shakhtar

Madrid y Barça salieron tan airosos del cruce que les tocó en los cuartos de la Champions como preocupados por la gran posibilidad que existe de medirse entre sí en semifinales. Y es que en ningún caso habrá final española tras el sorteo realizado ayer en Nyon, lo que obligará a unos y otros a dejar sin sueño a su eterno rival en puertas de la gran cita prevista para el 28 de mayo en Wembley.

Antes de llegar a esa tesitura, por supuesto, habrá que hacer frente a unos cuartos que se pueden considerar relativamente amables. Los blancos se verán las caras en este primer obstáculo con el Tottenham, mientras que los azulgrana lo harán con el Shakhtar. La ida de estos choques será, respectivamente, el 5 y 6 de abril; la vuelta, el 12 y 13 del mismo mes, aunque con el orden invertido. Es decir, el Barça jugará la vuelta en martes y por lo tanto llegará con un día más de descanso que el Madrid al Clásico que se juega el fin de semana posterior. Eso sí, lo hará tras afrontar un largo viaje a tierras ucranianas.

Tottenham y Shakhtar constituyen dos rivales sin pujanza en esta competición, al menos reciente, y son relativamente más cómodos que Inter, Chelsea o Manchester United, todos ellos integrados en la parte del cuadro contraria a la de los equipos españoles. El Tottenham fue semifinalista de la Copa de Europa en 1962, pero en los últimos años se ha mantenido lejos de los focos hasta regresar esta temporada a la élite. El cuadro de Redknapp superó la primera fase por delante del Inter y apeó al Milán en octavos sin encajar un sólo gol. Además, el hecho de que la vuelta se juegue en White Hart Lane es una complicación para el Madrid.

La final. Algo parecido ocurre con el Barça. El Shakhtar viene de zarandear al Roma en los octavos y desbancó al Arsenal como primero de grupo en la liguilla. Además de la rigidez de los conjuntos de la Europa del este, incorpora la calidad que le aportan sus muchos brasileños, casi todos ellos futbolistas talentosos de ataque.

Bastante peor hubiera sido emparejarse con Manchester, Chelsea o Inter. Pero no será así. Los interistas jugarán ante el Schalke de Raúl y los dos ingleses lo harán entre sí. De entre ellos saldrá uno de los finalistas que se medirá, siempre a priori, a nuestro único superviviente: ¿Barça o Madrid?