El Celta reserva billete a Primera con una goleada

Alguna vez habrá que tomar una determinación a nivel global sobre lo que hay que hacer cuando un jugador se encuentra tirado en el suelo, presuntamente lesionado. La jugada del primer tanto celeste llega con Dimas besando el césped y los defensas numantinos reclamando que De Lucas tirara el balón fuera. El mediapunta no lo hizo, como no lo ha hecho ningún jugador vigués en lo que va de temporada. Obvió las protestas y se dedicó a lo suyo. Dribló a Óscar López y asistió a David para que abriera la lata. El punta se encontraba en fuera de juego. De eso sí se podrán quejar los castellanos, de lo otro, no.

Es una pena que esa acción descentrara a los rojillos porque hasta ese momento estaban realizando un gran partido y tenían al Celta acorralado. De hecho, sólo unos centímetros evitaron que se adelantaran en el marcador. Barkero y Dimas estrellaron sus disparos en la madera, para susto de Falcón. El gol del Numancia parecía cuestión de tiempo, pero la jugada polémica de la noche diluyó todas las opciones de puntuar de los sorianos. Incluso Unzué estaba más preocupado de pedirle explicaciones a De Lucas que de dar indicaciones a los suyos.

Fiesta celeste.

La segunda parte comenzó con Cedric amenazante. El congoleño llegó con peligro a puerta en menos de un minuto. Sólo fue un espejismo. A la jugada siguiente De Lucas y David fabricaron un gol calcado al primero. Eso sí, con un pequeño matiz. Esta vez no había opción a la protesta. A partir de ahí, los vigueses fueron un ciclón imparable para un Numancia que ya había tirado la toalla. Los laterales gallegos, Lago y Mallo, fueron los mejores extremos del cuadro local. Y como muestra, un botón. El tercer tanto activó los fuegos artificiales en Balaídos. Roberto Lago se incorporó por su carril, hizo la pared con De Lucas y superó a Navarro con un toque de calidad. El público vigués estalló de júbilo, pero aún faltaba la guinda. Dani Abalo saltó al campo en la recta final, pero le sobró tiempo para hacer la jugada del partido y completar la goleada para que el Celta recupere la segunda plaza a costa del Betis.

Herrera: "Les dije que tiraran el balón"

"Fuimos mejores y merecimos ganar. Unzué tiene parte de razón cuando dice que se siente engañado. Siempre le digo a mis jugadores que hacemos lo mismo que el rival y el Numancia nos comunicó que la iba a tirar fuera. Se lo dije, pero quiero entender que no me oyó. Ahora no la vamos a tirar nunca".

Unzué: "El Celta nos ha engañado"

"El resultado final es duro. Competimos hasta el 2-0, pero después nos pudo más el corazón que la cabeza. Me voy un poco quemado porque me siento engañado. Antes del partido, el delegado del Celta nos dijo que iban a tirar el balón fuera y en el descanso De Lucas me dijo que ellos nunca la tiran fuera".