La afición está dividida por su posible marcha

Si en los despachos del Imtech Arena la decisión es torpedear la salida al Madrid de Van Nistelrooy como sea, entre el pueblo llano del Hamburgo la cosa cambia. Los aficionados están divididos. Varios grupos de hinchas se acercaron ayer al entrenamiento y algunos portaban camisetas, fotos y cromos del holandés. Pensaban que podía haber sido la última ocasión de ver a su ídolo. Heinrich, un adolescente con la bandera romboidal del Hamburgo, está desesperado. "¿Se va al Madrid?", pregunta a AS. "¡Por favor que se quede! Es nuestro mejor jugador", pide casi suplicando.

En Internet, en los foros del Hamburgo, es el tema de moda. "Somos un club de fútbol, no una organización sin ánimo de lucro", dice un internauta, y otro cuestiona el deseo del nueve oranje: "Cambia jugar aquí por estar en el banquillo del Madrid con más dinero". Otra facción numerosa, sin embargo, le entiende: "Es comprensible que quiera irse. En el Real puede ganar títulos y lo hace porque quiere otra Champions".