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Miguel Lopes

"El Betis es un grande: lo demuestra su afición"

20 días le han bastado a Miguel Lopes (Lisboa, 1986), para domar la banda derecha del Betis. El domingo, el lateral se marcó un jugadón que acabó en el 2-1 de Israel.

Actualizado a
Miguel Lopes.

Los informes sobre usted decían que es un "lateral con grandes aptitudes defensivas", pero no que subiera tanto y tan bien. ¿El jugadón ante el Valladolid fue una casualidad?

Los informes están mal (risas). Subo siempre que puedo, cuando sé que no voy a descuidar la parte de atrás. Pero lo hago bastante y creo que con éxito a veces, como en la jugada del gol del domingo. Actué y puedo desenvolverme si hace falta de extremo, así que ir al ataque me resulta algo natural.

También se dice en Portugal que a la afición del Oporto le encantaba su juego alegre en la banda, por recordar al de Paulo Ferreira, ahora en el Chelsea.

Me siento muy halagado por eso. Después de que me ficharan del Río Ave jugué poco, sobre todo por culpa de una lesión. Pero la gente me trató bien porque di todo lo que tengo, como haré ahora aquí en el Betis.

Su técnico allí fue otro Ferreira, Jesualdo, que este verano se marchó al Málaga, a apenas 200 kilómetros de aquí. Podría encontrárselo en Copa del Rey hoy mismo. ¿Ganas de revancha?

No me importa qué equipo nos toque en Copa, aunque mientras más fácil, mejor. En cuanto a Jesualdo, no hablamos demasiado él y yo, pero me deseó suerte y lo mismo puedo decir yo de él.

Jesualdo y Mourinho de técnicos, Cristiano, Carvalho, ahora usted. ¿Se está tiñiendo la Liga de portugués?

Pues ojalá, porque tal vez aquí se desconoce un poco nuestro fútbol y está ahí al lado. En Portugal existen un nivel y un estilo parecidos a los que tiene España, la mejor porque se proclamó campeona del mundo. Pero allí hay un montón de futbolistas y de entrenadores que lo harían bien en Primera y en Segunda División.

¿Tiene usted alguna otra referencia en el fútbol luso?

Evidentemente, Figo. Es mi ídolo. Porque jugó en el Barcelona y el Real Madrid, pero también porque además de calidad poseía una gran humildad. No jugamos exactamente en la misma posición, pero si me tengo que fijar en alguien, debe ser en él.

Centrémonos aquí. ¿Cómo vive sus primeras semanas en el Betis, en Sevilla?

Buff, estoy realmente encantado. Esto se parece mucho a Lisboa, mi ciudad natal. El clima es bueno, juego de titular, ganamos todos los partidos y la gente nos aplaude siempre. ¿Qué más se puede pedir?

Casi nada... De la gente le quería yo hablar. El domingo, al terminar, se le vio sorprendido con la afición del Betis. ¿No se lo esperaba?

Al Betis se le conoce mucho en Portugal, porque casi siempre ha jugado en Primera y porque ha viajado bastante por Europa, pero... Si le digo la verdad, parece difícil creer que un club que está en Segunda pueda congregar a tanta gente en el estadio, y también allá donde va.

Pero así es. ¿Cómo lo vive?

Pues lo disfruto. Soy una persona a la que le encanta el fútbol, así que no me puede pasar nada mejor que jugar ante un estadio lleno, y más si está de parte de mi equipo. La afición del Betis es especial, anima hasta cuando va perdiendo. El domingo, ante el Valladolid, me volvió a demostrar que este club es muy grande y que tiene que volver a Primera lo antes posible.

¿Y la situación institucional, le parece tan buena?

De cosas que están fuera del campo no debemos hablar los futbolistas, y le aseguro que en el vestuario no le dedicamos un solo minuto. Es una de las claves para hacer las cosas bien.

Mel no dudó un momento en hacerle titular nada más llegó. ¿Qué le dijo el míster?

Hemos hablado poco personalmente, pero tampoco hace falta. Se ve que es un técnico joven, con las ideas muy claras. Sabe transmitirnos sus ganas de ganar.

¿Qué vestuario se ha encontrado, qué tipo de fútbol en este país?

El grupo tiene garra, es fantástico. Somos gente que lo damos todo en el campo, que nos ayudamos, y así es mucho más fácil sacar buenos resultados. En cuanto al fútbol, me parece que la Segunda española se parece bastante a la Primera de Portugal.

¿Así que no le ha costado, como pasa con otros muchos extranjeros, adaptarse a nuestra Liga?

No, y eso que llegué hace sólo 20 días. Para empezar, tengo la suerte de hablar español (perfectamente; el periodista lo puede confirmar) porque mi padre trabajó algún tiempo en Andorra. Luego están los compañeros, que son fantásticos y me han ayudado mucho. Ricardo, también portugués, me dice donde tengo que ir y no, lo que puedo hacer...

¿Cómo vive que su compatriota no tenga ficha y no pueda jugar?

No me corresponde a mí hablar de su situación, pero supongo que Ricardo aprenderá de ella, porque todo nos enseña. Le deseo lo mejor.

Ricardo fue internacional con Portugal y usted, de momento, sólo Sub-21. ¿Puede ser el Betis su trampolín para la absoluta?

Si le digo la verdad, no pienso en eso, sólo en hacerlo bien, en ganar y en ascender. Si luego viene la Selección, perfecto, porque querrá decir que he logrado lo máximo en el Betis.