El Cádiz respira y se sitúa a un punto de la salvación

Poco a poco, el rostro de los gaditanos va recuperando su color natural. Del tono pálido miedoso se va pasando al torrado habitual de esta zona. Lo hace la temperatura, también ese sol que pega, y bien fuerte, en esa grada principal que es ahora la de preferencia. Y también se rehace el buen tono facial con la situación del equipo amarillo, que después de estos dos partidos en el Carranza se ha quedado a sólo un punto de la permanencia, después de sumar cuatro de los últimos seis en juego.

El nivel que exhibe esta temporada la categoría está beneficiando claramente al equipo de Víctor Espárrago en su camino a la salvación. El Girona, que pese a todo sigue anclado a una zona relativamente cómoda, mostró una imagen muy por debajo de lo que debe ser habitual en Segunda. Probablemente, fue uno de los equipos más flojos que han pasado por La Tacita esta temporada. Quizás fuera una mala tarde, porque hay que reflejar la importancia que tuvo en el triunfo amarillo el gol tempranero de Enrique y las dos paradas providenciales que hizo Dani ante Xumetra y Kiko Ratón.

Presión.

El equipo de Espárrago salió bien plantado al partido y prueba de ello es que sólo le hizo falta nueve minutos para marcar el primero. La jugada la inició Toedtli, que habilitó sólo en la banda a Ogbeche para que éste, certeramente, diese el pase de la muerte al 'bicentenario' Enrique, que no falló. El camino se abría, pero el Cádiz, fiel a su costumbre, cedió unos metros que ni Ratón ni, sobre todo, Xumetra, que envió un balón al larguero, fueron capaces de aprovechar.

En la segunda parte los amarillos hicieron un gran trabajo de presión arriba. Aunque apenas crearon ocasiones claras, tampoco el Girona se acercó con excesivo peligro. Al final, Moha finiquitaba el partido con su horrenda cesión y Toedtli aprovechó el regalo.

Narcís Juliá: "El primer gol nos hizo daño"

"El gol inicial de Enrique nos hizo mucho daño. Si ellos no se hubieran adelantado seguro que hubieran tenido más nervios. En la primera parte tuvimos el control del partido en los instantes finales, pero en la segunda el partido estaba mucho más abierto para cualquiera de los dos equipos. Lo cierto es que un error de Moha nos ha propiciado el segundo gol y ahí ya el partido terminó".

Espárrago: "Tenemos que creer"

"Necesitábamos ganar. La semana pasada el equipo había hecho un buen partido. La clave estuvo en que han entrado las ocasiones que generamos. Esta victoria nos vale no sólo en el aspecto deportivo, sino también en la motivación de los futbolistas. Los futbolistas deben creer que están en el camino adecuado para salir de la situación en la que nos encontramos".

El detalle. Carranza se va animando

La afición amarilla no hizo esta vez oídos sordos a su equipo y acudió al estadio en su mayor parte, pese al importante calor que hacía en la Tacita de Plata. El club cifró en 12.000 los espectadores, muchos más que en otros partidos.