Román Gómez Ponti
"Godall y Ferrer deberán avalar, juntos o separados"
Román Gómez Ponti es abogado y profesor de derecho administrativo de la Universidad de Barcelona. Desde hace dos años es presidente del Tribunal Català de l'Esport. Estará atento a la campaña electoral del Barça.
¿Desde cuándo es usted presidente del TCE?
Desde mediados de 2008.
¿Qué peso tiene el TCE?
Es el máximo órgano competente para resolver todas aquellas subcuestiones que se puedan suscitar dentro del proceso electoral. De cualquier club de Cataluña.
AS publicó que la LFP obligaría a los candidatos continuistas a tener que presentar un aval para relevar a Joan Laporta. ¿Qué opina?
La norma que regula la cuestión de los avales es muy clara, de la que se desprende la obligación de hacerlo.
¿Por qué tiene que avalar?
En un caso así, el concepto de junta de continuidad no se cumple. Por lo tanto es difícil aplicar el beneficio de la compensación de avales.
¿Qué significa todo esto?
De acuerdo con la Ley del Deporte y su normativa de desarrollo, la Junta Directiva de un club como el Barça que no está reconvertido en SAD debe depositar un aval ante la LFP por el cual garantice un 15 por ciento de su presupuesto de gastos.
¿Y esto podría aplicarse en la idea de sucesión que tienen Alfons Godall y/o Jaume Ferrer?
Acudiendo por separado rotundamente no. Deberían avalar ambos con sus equipos.
¿Y si hay consenso?
Casi seguro que también, por cuanto hay directivos que no pasaron por un proceso electoral previo.
¿Y Javier Sala Martín?
Su caso es especial; nunca fue elegido en un procedimiento electoral. Por lo tanto este supuesto también está contemplado en la ley del deporte y sus normas de desarrollo.
¿Qué quiere decir?
Que de la Junta electa en 2006 tan sólo se mantienen en su cargo un número de directivos que hace de difícil aplicación el concepto de junta de continuidad.
¿Por qué hay tanto silencio con el tema de los avales?
No creo que moleste. Creo que lo que hay es desconocimiento de una norma respecto de la que se ha dado una interpretación demasiado laxa.
¿Sería ilegal que se convocaran elecciones y que los continuistas no dijeran nada sobre los avales?
Lo ilegal sería que tomaran posesión, por cuanto el requisito del aval está previsto para ese momento.
Nadie se salvará de ello.
Sería posponer el cumplimiento de un requisito.
¿Se pueden hacer trampas?
No. Lo triste y lamentable sería intentar tomar posesión sin avalar y que la cuestión se resolviera cuatro años después en los tribunales.