Pedro Rodríguez Ledesma ha firmado en 48 horas tantos autógrafos como nunca antes. Su regreso a Tenerife como el hombre que ha marcado un gol con el Barcelona en seis competiciones diferentes, lo jamás conseguido por ningún otro futbolista, le ha erigido en un ídolo de masas y en una figura adorada y elogiada por todos. La última escenificación de su popularidad tuvo lugar ayer en Tincer. Pedro tuvo que ser evacuado en un coche policial porque había 2.700 personas esperando por una firma.

En Abades, su casa, tras una larga e intensa sesión de fotos y autógrafos, hizo un anuncio tan inesperado como especial. "Si marco contra el Tenerife", dijo, "no lo voy a celebrar". Nunca militó en las filas del equipo insular ni tampoco lució la blanquiazul, pero cuenta Pedro que su decisión obedece "al respeto y al cariño" a la gente que aprecia. Han sido tantísimos los aficionados chicharreros que le han brindado su admiración, que no quiere el 17 del Barça ni molestar ni incomodar a nadie. "No lo celebraré", repitió ayer. Tenerife recibirá al Barça el próximo 10 de enero.

Todo generosidad, Pedro contó también que su visita al Heliodoro Rodríguez López será "entrañable". "Me hace mucha ilusión poder jugar ese partido porque supone hacerlo ante mi gente, con mi familia y amigos en el estadio".

Además, habló también de las posibilidades crecientes de que su nombre aparezca en las próximas convocatorias de Vicente del Bosque y sobre todo en la del Mundial. "Sé que está muy difícil pero, ¿por qué no querer ir?", se preguntó en voz alta, consciente de que lo que está logrando con los colores del Barça es "algo muy grande". Y lo que está por venir...