La cara de Luis García en el banquillo los minutos finales lo decía todo. Sin hacer absolutamente nada, el Albacete se iba a llevar un partido en el que su equipo había hecho mil veces menos. Y ya es complicado. La imagen del Levante fue francamente pobre, de equipo sin ambición, sin hambre, sin ganas de ganar. Y, así, al final suele pasar lo que pasa, que te vuelves a casa con una derrota, que parece que en el vestuario escuece, pero que por lo visto sobre el campo invita a la duda. La caída libre de los granotas no cesa. Dos puntos de los últimos 12, undécimos en la tabla hoy y puede que algo más abajo esta noche. La idea que se quiere transmitir es que no pasa nada. Y, por ahora, pasar, lo que es pasar, pues eso, nada, pero si hablamos de sensaciones es evidente que algo falla, atendiendo sobre todo a los últimos partidos.

Demasiada igualdad hubo en la primera parte donde quizá el Albacete rondó más el área de Manu, pero los granotas, aunque llegaron veces contadas, fueron con algo más de peligro. Rubén mandó el primer aviso con un derechazo desde la frontal que repelió bien Cabrero. Luego Juanlu y Xisco tuvieron dos buenas bolas para empalar pero que mandaron muy por encima del larguero y casi al final Iborra quiso sorprender al meta manchego con un balón a la escuadra, pero que la rosca terminó mandando fuera. El centro del campo azulgrana no existía. Ni el de Moncada ni Pallardó mandaban y el Alba se crecía, aunque Manu tampoco es que tuviera que esmerarse demasiado.

Lo mínimo.

Tampoco tuvo que hacerlo en la segunda mitad, tan sólo para sacar el balón de su portería en una jugada infantil, en la que un despiste cogió la espalda de Carril y Souza la puso al pichichi Stuani, que no perdonó. Una y no más, pero suficiente. Porque, además, los cambios no aportaron nada a un equipo que ayer fue de lo más ramplón de la categoría. Xisco Muñoz parece que aún no ha vuelto de la lesión y Guerra ni la olía. Sólo Juanlu ponía algo de ganas junto a un Rubén que se desespera de tener que bajar unos balones que deberían irle al pie. La falta de confianza es evidente y todos coinciden en que hay que recuperarla, pero parece que éste no es el camino.

El detalle: Décima amarilla de dani carril

Dani Carril vio ayer una nueva cartulina amarilla y ya van diez en lo que llevamos de Liga (15 partidos ha jugado). Ésta conlleva, por tanto, un partido de suspensión, por lo que el lateral se perderá el encuentro de la próxima jornada en la que el Cartagena visitará el Ciutat.

Manu "Podemos estar más arriba"

"El equipo tiene capacidad para estar más arriba y lo hemos demostrado, pero tenemos que reaccionar. Hay que ir domingo a domingo, sin pensar más allá y estar metidos en los pequeños detalles que tiene cada partido. Hoy creo que debería haber sido de empate a cero. Nos hacen un gol en una jugada aislada y luego no hemos sabido reaccionar. A partir de ahí, ellos empiezan a hacer un juego mucho más trabado y nosotros hemos caído en él. Hay que seguir trabajando igual".

Luis García "Hay que querer más la pelota"

"Tenemos que jugar mejor al fútbol. Creo que el partido es de empate. Ellos hacen dos o tres ocasiones, no han hecho nada y nosotros tampoco. El 0-0 hubiera sido lo más lógico. Tenemos que querer más la pelota. Hemos controlado su juego directo y en una jugada tonta, aislada, te ganan. El equipo no ha perdido el hambre, los jugadores ahora mismo están jodidos, pero hay que jugar mejor. Los cambios tampoco han salido bien. Hay que tener más personalidad y atreverse a hacer cosas".