¿Lo vio posible? ¿Creyó en el milagro?

Casi no me había sentado en el banquillo, cuando hicimos el primer gol. El fútbol tiene estas cosas y en un momento todo puede cambiar.

¿Habían ensayado la jugada?

Creo que eso, por mucho que practiques, no puede salir siempre. Sí que Sheva se queda lanzando faltas tras las sesiones y lo hizo con mucha potencia. Tuvimos la opción, la logramos y ahí nos quedamos.

¿Está decepcionado?

Queríamos continuar en la competición, claro, pero sabíamos que era muy complicado. Éramos cuatro campeones de Liga en el mismo cuadro y el nivel, altísimo. El Barça es el campeón, un equipo que juega de maravilla al fútbol y que mereció estar en la fase de octavos de final. Ojalá que acaben ganado la Champions League de nuevo.

Todos dependían de sí mismos.

Ese es el potencial de la Champions League. Peleamos hasta el final.

¿Qué le parecieron los goles del Barcelona?

Un disgusto para mí, como no podía ser de otra manera. El primero llegó después de un rondo inmenso, en el que abrieron el campo y que culminó Xavi; en el segundo, Messi demostró su calidad.

¿Entiende la entrada de Almeida a Messi?

Fue un lance del partido y no hay que darle más vueltas.