Kaká tuvo por fin una actuación convincente

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Kaká tuvo por fin una actuación convincente

Kaká tuvo por fin una actuación convincente

Kaká empezó a ser Kaká en el clásico. Desde que el crack brasileño aterrizó en el Real Madrid no terminaba de ofrecer de forma consistente la magia que destiló en el Milán, pero en el Camp Nou la historia fue diferente: se ofreció, mandó por momentos y fabricó tres jugadas de genio...

Doce jornadas después, Kaká enseñó en el Madrid por qué fue Balón de Oro y FIFA World Player en 2007. El Camp Nou fue el escenario donde el crack brasileño ofreció su primera actuación convincente como madridista: fue el capataz de las peligrosas contras blancos y fabricó cuatro jugadas (tres de ellas con pinceladas de genio) que no culminaron en gol al fallar Cristiano, Marcelo y Benzema.

Porque el domingo se vio al Kaká más participativo de la temporada. Intervino en 45 jugadas del Madrid, en once de ellas el resultado fue un remate a la portería de Valdés y cinco acabaron en córner. También dio 53 pases de los cuales treinta fueron buenos (el 56,6 por ciento) y se vio que sus conexiones tienen acento portugués: Cristiano y Marcelo fueron sus mejores socios, dio y recibió del luso seis pases, mientras que su compatriota le dio la pelota siete veces y Kaká hizo lo propio en seis ocasiones.

Sin embargo, donde el 8 blanco mostró todo su talento fue cuando penetró en la zaga barcelonista con su combinación de velocidad y regates.

La primera fue en el minuto 19, en la jugada que pudo cambiarlo todo (imágenes de la derecha). Todo lo inicia en la izquierda Marcelo con un taconazo para la carrera de Kaká, que se lanza en diagonal hacia la frontal, con un rápido regate coge a contrapié a Piqué, aguanta un agarrón de Puyol y culmina la acción con un pase en bandeja a Cristiano, pero el luso perdonó el 0-1.

Marcelo. Su siguiente intervención también llevó peligro. En el 25' vio a Marcelo sin marca en el borde del área pero el lateral controló mal y Puyol pudo taponar su disparo. La tercera ya fue con 1-0 en el luminoso. En el 69', recibió el balón de Benzema en la banda izquierda sobre la línea del área, Piqué se lanzó el césped pero le evitó con un recorte en una baldosa y su pase de gol no fue aprovechado por el francés.

Su último fogonazo llegó en el 76'. Inició una preciosa pared con Higuaín para evitar a Abidal, el lateral culé se repuso pero Kaká volvió a burlarle con un caño, encadenado con un vertiginoso regate con la izquierda para dejar a Puyol en el suelo. Al final, su pase de la muerte a Raúl fue desviado a córner por Abidal in extremis.

Cuatro acciones que pudieron vestir el clásico de blanco. Kaká ya está aquí...