Enfermo. No sé qué extraño virus habrá cogido el Atlético, pero la enfermedad empieza a ser preocupante. El equipo madrileño sigue padeciendo el Virus FIFA, ese que hace que desde el año 2007 no gane un partido de Liga después de un parón por compromisos internacionales. Quique ya tuvo su propia convalecencia, ya que contrajo la gripe A. Fue llegar al Manzanares y ponerse malo. Por unas cosas u otras, ha dirigido al equipo tres partidos de Liga y no ha ganado ninguno. El técnico no logra atajar el virus que se ha instalado en el equipo y el Atlético podría acabar hoy la jornada como colista.
La defensa. Ya se sabe que cuando uno está enfermo tiene las defensas muy bajas y cualquier contratiempo le deja seriamente tocado. Eso es lo que le pasa al Atlético de Quique. La debilidad comienza atrás, porque el equipo no da ningún síntoma de recuperación en su zaga. Sólo así se explica que Perea sea casi capaz de hacerse un gol en propia puerta o que cualquier balón cruzado al área rojiblanca pareciera una ocasión clara del deportivo. Además, al Atlético todo se le vuelve en contra ya que en otra situación seguro que el penalti en el último minuto del tiempo añadido no se hubiera señalado. Otra muestra más de la enfermedad rojiblanca.
Kun y Forlán. El Atlético se había hecho a la idea de hacerse con casi todos los puntos de aquí hasta Navidad, sólo así podría empezar a salvar esta situación preocupante. Ahora ya ganar al Espanyol es una obligación y menos mal que el Atlético tiene a Kun, que no entiende ni de virus ni de enfermedades. Agüero no jugó con Argentina ante España para terminar de recuperarse de sus molestias y en Riazor fue el colchonero más peligroso. Por eso Quique le tapó la boca al final del partido, perderle por sanción habría sido la peor noticia. Forlán sí acusó el virus y, aunque calentó casi durante toda la segunda parte, finalmente no jugó. El uruguayo tiene que ser pieza clave para la recuperación rojiblanca.
Asenjo. El portero no gana un partido en la Liga desde el 30 de noviembre de 2008. Es decir, hace casi un año. Un dato demoledor. Y eso que frente al Deportivo fue uno de los mejores de su equipo. El equipo gallego sólo pudo hacerle gol en un córner y después de penalti. Para el equipo madrileño quizá la única buena noticia es que Asenjo está empezando a recuperar el nivel que mostró en el Valladolid.
Refuerzos. Si el Atlético quiere conseguir los objetivos marcados en el inicio de campaña necesita reforzarse en el mercado invernal. Ya se advertía al inicio de la temporada que la plantilla era corta y muy mejorable, pero ahora ya es casi una obligación reforzar el equipo en enero. Cerezo, Gil Marín, el consejo de administración y Pitarch tienen ahora la última palabra. El club tendrá que sacar el dinero de donde sea o armarse de ingenio para fichar las dos o tres piezas que le hacen falta al equipo.
Champions. Y si el equipo necesita rearmarse como conjunto también lo tiene que hacer moralmente. El equipo rojiblanco le costó sangre sudor y lágrimas clasificarse para la champions y aunque ya está eliminado de esta competición, necesita seguir en la Europa League. La Copa y esa competición europea pueden suponer las únicas alegrías de la temporada, por lo que no hay que tirar ningún torneo. Al Atlético le vendría de perlas ganar frente al APOEL, en un campo donde Chelsea y Oporto ganaron por la mínima.
