Clos Gómez soportó la presión de una designación innecesaria y completó un partido aceptable. Hizo valer sus nervios de acero para dirigir el encuentro con determinación. Al final, la única jugada decisiva que se le pudo discutir fue la que propició el primer gol. Santana perdió la pelota, ligeramente agarrado por Ramos, pero no fue una falta descarada. En la segunda parte tomó dos decisiones complicadas y acertó al expulsar a Ramos (no jugará contra el Alcorcón en Copa) y al señalar un fuera de juego de Ujfalusi.
Liga BBVA | Atlético - Real Madrid