Pablo Hernández llevaba tiempo llamando a las puertas del selecto tridente del Valencia que forman Villa, Mata y Silva y ayer hizo saltar el cerrojo para meterse en ese ataque de lujo. Él solo destrozó al Almería con tres acciones decisivas: asistencia, expulsión de Alves y golazo desde 37 metros. Este disparo ya forma parte de lo mejor que se ha visto esta Liga, como el tanto del propio Pablo al Atlético, pues el interior diestro aúna vistosidad y efectividad.
Con Pablo llamando de nuevo a las puertas de la Selección, los de Emery ganan un efectivo más en su lucha por regresar a los puestos de Champions, donde los ches no estaban desde la segunda jornada. Así se confirma la mejoría evidenciada ante el Barça y se tranquilizarán los que ya esperaban a Unai agazapados tras la esquina de las derrotas. Y es que el técnico ha logrado el equilibrio que buscaba pues, la clave en este renacimiento no es que los de arriba marquen, que siempre lo han hecho, es que atrás llevan tres partidos con el marco a cero, algo que no sucedía desde que Cañizares estaba bajo palos.
Y eso que el Almería empezó mandando, con una medular blindada con trivote y buscándole las cosquillas a la espalda de la zaga che con la velocidad de Crusat y Piatti. Uno de los centuriones de Hugo Sánchez en la sala de máquinas, el poderoso M'Bami, pudo cambiar el guión tras pescar un mal despeje, pero su violento disparo lo repelió el larguero.
Mata dio la réplica haciendo trabajar a Alves, que poco a poco fue convirtiéndose en el mejor del Almería, señal de que el Valencia empezaba a mandar con sus bajitos haciendo circular el balón a mayor velocidad, lo que hacía inútil la presión de los locales, que ya empezaban a llegar tarde conforme bajaban su tono físico.
Sin color.
En la segunda mitad el monólogo valencianista fue total. Primero golpeó Villa, desapercibido hasta entonces, tras gran asistencia de Pablo. Luego el interior expulsó a Alves cuando encaraba el marco almeriense y, finalmente, culminó su partidazo con un disparo desde 37 metros. Ahí murió el choque y renació la estrella de Pablo Hernández.
Emery
"Este partido era vital porque son puntos que nos colocan de nuevo en Champions. El Valencia ha sido inteligente a la hora de defender y atacar y estaba concienciado de la dificultad del choque".
Hugo Sánchez
"El resultado ha sido muy abultado y, tras la expulsión del portero, era muy difícil. Quisimos empatar pero dejamos espacios atrás. Perder en casa nos duele, pero hay que seguir trabajando".
