El centrocampista del Villarreal Santi Cazorla afirmó que la plantilla "no piensa en la posibilidad de descender" a pesar del mal inicio de temporada que ha llevado al equipo que entrena Ernesto Valverde a ser colista de la Liga BBVA.
Cazorla manifestó que el equipo está último por "muchas circunstancias" y que hay que "intentar cambiar esta dinámica". "Tenemos que encontrar lo que estamos haciendo mal para que no pase en el siguiente partido", señaló.
El asturiano apostó por ir partido a partido y no pensar en metas altas para esta temporada. "No sirve de nada pensar en clasificarnos para la Europa League, tan sólo pensamos en ganar el domingo y dejar cuanto antes el último puesto", reconoció.
La plantilla amarilla confía en una reacción inmediata en el partido del próximo domingo ante el Málaga. "Estamos un poco con ansiedad porque vemos que pasan partidos y seguimos metidos abajo", asumió. "Si se gana el siguiente partido subiremos en la tabla y no hay que ponerse nerviosos", agregó.
Pese a los malos resultados, el internacional demostró confianza ciega en su entrenador, Ernesto Valverde. "Confiamos en el míster y deseamos que continúe toda la temporada", dijo en su defensa porque considera que "está trabajando bien" y no "se puede pensar en que si se pierde ante el Málaga pueda dejar de ser el entrenador".
Dejando a un lado el partido ante el Málaga en Liga, el próximo rival del ''Submarino'' será el Lazio de Roma en la UEFA Europa League. "Vamos a ir allí a ganar y ojalá podamos romper la dinámica que llevamos en Roma", deseó. De todas formas, Cazorla es consciente de que será "difícil" porque es un campo "complicado". "Nuestro objetivo es sumar tres puntos", finalizó.
Roig se reúne con la plantilla para darle ánimo y exigirle reacción
Fernando Roig, presidente del Villarreal, se reunió hoy con la plantilla de jugadores para darles ánimos y exigirles una reacción que saque al equipo de la delicada situación en la que se encuentra como colista de Primera División.
El máximo dirigente del Villarreal acudió hoy a la sesión de entrenamiento de la plantilla y se encerró con los futbolistas en el vestuario de la ciudad deportiva del club, según ha trascendido. Ante todo, Roig quiso dar tranquilidad en un momento tan delicado, ya que desde el club lo que más preocupa es la imagen de los últimos minutos y los nervios de los futbolistas en el partido ante el Xerez.
Desde el club se asegura que Roig ha querido rebajar con esta reunión la tensión que se vive en la plantilla y que ha sido reconocida hoy por jugadores como Santi Cazorla y Robert Pires, quienes califican de "muy positiva" la visita del presidente.
Así, Cazorla consideró que es "bueno" que el presidente les dé ánimos, una nueva muestra de "cómo se hacen las cosas en este club", mientras que Pires explicó que el equipo necesita "tranquilidad y ánimos, y que te los dé el presidente es muy necesario".
