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Forlán llegó tarde pero quiere jugar en el Reyno
Forlán regresó a España tras jugar con Uruguay dos partidos clasificatorios para el Mundial. El charrúa llegó con ocho horas de retraso respecto a lo previsto. Por problemas burocráticos no cogió el vuelo en el que venía Kun Agüero y no se pudo entrenar con el resto de sus compañeros.
Diego Forlán aterrizó ayer en Barajas procedente de Buenos Aires a las 14:40, ocho horas después de que lo hiciera su compañero, y rival el pasado miércoles, Kun Agüero. En un principio estaba previsto que ambos regresaran juntos, pero el uruguayo llegó más tarde que el argentino debido a que por problemas burocráticos no pudo coger el avión en la capital porteña que sí tomó Kun. Por ello tuvo que esperar al siguiente vuelo que salía desde Argentina rumbo a Madrid. Debido a este retraso el Cacha no se pudo entrenar con el resto de los rojiblancos, los internacionales Simao y Agüero incluidos, que se ejercitaron a partir de las 10:30 en el Cerro del Espino.
Forlán vuelve de los partidos con Uruguay con una sobrecarga muscular debido al esfuerzo de los dos encuentros con su selección, que ha disputado de principio a fin. Por eso, su participación el domingo ante Osasuna no es segura y es duda para el choque. Mañana se entrenará junto al resto de sus compañeros y hablará con Abel y con los servicios médicos del club para decidir su participación o no en el Reyno. En un principio, el técnico rojiblanco medita reservarle y no alinearle, sobre todo pensando en la importante cita del miércoles ante el Chelsea en Londres.
Osasuna. El jugador, en declaraciones a AS en Barajas, espera llegar en buenas condiciones al partido, alegando que el encuentro se disputará mañana a las 21:00 y que tendrá tiempo para descansar. Pese a su deseo de jugar en el Reyno puede que, como la pasada campaña, vea el inicio del encuentro desde el banquillo.