Pese a que durante todo el partido el Castellón había dado una imagen de más solvencia y más experiencia, el Salamanca logró la clasificación en la ruleta que significa la tanda de penaltis.

El Castellón, que la pasada temporada eliminó al Salamanca en la segunda eliminatoria de la Copa del Rey, hizo su partido, con solvencia y madurez, sabiendo cuándo debía atacar, es decir, al principio de la segunda parte, y con unos jugadores que buscaban el área contraria con rapidez.

El partido lo pudo ganar el Castellón, que llegaba a Salamanca con David Amaral como entrenador, el mismo que tuvieron los salmantinos la temporada pasada, pero el empate de Akinsola en el minuto 79 dio alas al equipo salmantino, aunque no pudo lograr una victoria ya que jugó con más corazón que con cabeza.

El Castellón hizo su partido, con madurez, con experiencia, con colocación en el campo y con tres jugadores, Ulloa, Jonathan o Ricardo Paez, que hicieron temblar a la defensa salmantina.

El Salamanca puso empeño, con la verticalidad que ayer aportaron Akinsola o Perico, pero le faltó el remate, el gol que le llevara a pasar la eliminatoria.

Al final, y como en las últimas temporadas, el Salamanca cae en los primeros partidos de la Copa del Rey.