Al Depor se le escapó su segunda Liga de las manos en el último suspiro. Sin embargo, ayer los gallegos juntaron los dedos para que esta vez no se derramara la esperanza de ratificar su dominio copero a las primeras de cambio. Los gallegos dieron la vuelta al marcador en los primeros compases del partido y el intercambio de goles con el Valencia se sucedió hasta que Romero puso tierra de por medio. La diferencia en el marcador fue una pesada losa para los anfitriones que, además, veían cómo su pichichi, Juan Sánchez, sólo lograba anotar un tanto de falta.

No obstante, el Valencia exprimió el punto débil del rival (la falta de efectivos para los cambios) y se puso a 9-6. Sin embargo, la calidad del Depor marcó las diferencias y con un 13-8 aguarda hoy al Madrid. A quien ya ganó en la final copera del pasado año. A quien arrebató la Liga anterior. A uno de los favoritos en este torneo.